Hoy es conocido, en mayor o menor medida, por cualquier espectador que haya visto las principales películas de la saga Star Wars, pero en su momento, resulta de lo más asombroso saber que George Lucas, el padre de la franquicia millonaria, ni siquiera lo había incluido en los primeros borradores de guion. Chewbacca, más cariñosamente llamado Chewie, fue un personaje que apareció a última hora en la historia que Lucas planeaba en los años 70 y que acabaría convirtiéndose en su proyecto más popular. Un personaje que nació inspirado por el propio perro del director, y que se ganó el corazón de todos rápidamente.
Indiana, el husky de George Lucas, fue la inspiración directa para dar vida a Chewbacca en Star Wars
Ya hemos contado en alguna que otra ocasión la gran cantidad de vueltas que dio George Lucas en los años 70 para crear Star Wars. El cineasta cambió en numerosas ocasiones protagonistas, tramas, nombres... Hasta finalmente tener la versión que llegó a los cines en 1977 (y que aún así recibiría más cambios en años posteriores). En este sentido, un elemento que no estaba planeado por Lucas inicialmente era el compañero de aventuras de Han Solo, el inseparable wookiee Chewbacca.
Tal y como recogió el portal Slash Film en su día de una entrevista de 1997 con Peter Mayhew, el actor que encarnó a Chewbacca durante décadas, el bueno de Chewie fue un personaje que en el guion final apenas aparecía en tres o cuatro páginas. Además, en un principio, no era la criatura simpática y entrañable que conocemos todos.
El propio George Lucas confesó para Hollywood Reporter en 2019, recordando a Mayhew tras el fallecimiento de este, que la idea originaria con Chewbacca era mostrar a una criatura mucho más brutal y feroz. No obstante, Mayhew no fue capaz de aportar ese cariz al personaje y acabó llevándoselo a su propio terreno. "Por mucho que lo intentara, no era feroz. Era tu mejor amigo hasta que se molestaba y luego se hacía a un lado. Era un gigante gentil", rememoraba Lucas.
El director, de hecho, señala que la interpretación de Chewbacca de Mayhew "era como mis perros". Algo que no iba nada desencaminado con el origen de la criatura, puesto que Lucas utilizó a una de sus mascotas de cuatro patas como referencia directa para el aspecto que tendría Chewie. "Chewbacca se inspiró en Indiana, mi husky de Alaska", desveló Lucas en el libro 'Once Upon a Galaxy: A Journal of the Making of Star Wars: The Empire Strikes Back' de Alan Arnold.
Y es que sí, el husky de Lucas (al que Indiana Jones le debe su nombre), fue vital para crear al personaje de Chewbacca en Star Wars. El perro no solo hacía compañía a Lucas mientras este escribía todo el guion del filme, sino que en cierta manera se filtró en la historia por méritos propios: "Mi esposa conduce una pequeña camioneta, y el perro se sienta en el asiento delantero junto a ella y es más grande que ella. Indiana es un perro enorme, como un oso negro, y mientras Marcia conduce, lleva a un perro grande y peludo que parece ser el copiloto. Fue esa imagen la que dio forma al wookiee".
Una cosa acabó llevando a la otra, y la actuación de Peter Mayhew terminó de cerrar el círculo. El hombre, de 2,10 metros de altura, andaba con tacones para ser incluso más alto dentro del peludo traje de Chewie, y hasta aprendió a rugir como los wookiees para expresar sus interacciones con los demás (aunque al final sustituyesen sus sonidos por los de animales reales en la sala de montaje).
Con el tiempo, Chewbacca se ha convertido en todo un icono de la franquicia, hasta el punto de llegar a ser en la actualidad uno de los pocos personajes que ha aparecido en todas las películas principales de la saga, y uno de los más reconocidos por el público. Lo que no es decir poco hablando de una saga que cuenta con villanos como Darth Vader.
