Madrid ha empezado a levantar en Valdebebas la nueva Ciudad de la Justicia, un campus judicial pensado para concentrar en un único recinto 26 sedes hoy dispersas. La inversión pública asciende a 653 millones de euros y el proyecto declara una huella construida en el entorno de los 470.000 m², con 40.000 m² de zonas verdes, según las últimas fichas técnicas difundida.
El complejo aspira a atender a unas 30.000 personas al día con una gran plaza cívica de 13.500 m² —casi como la Puerta del Sol— y recorridos diferenciados para víctimas y acusados, un estándar que los nuevos edificios incorporan por diseño. La operación incluye ajardinamiento exterior y cubiertas vegetales para reducir demanda energética y mejorar confort, además de una avenida central que estructurará el acceso peatonal.
Capacidad diaria y accesos seguros
La obra civil se ejecuta en dos lotes en paralelo y fue adjudicada a dos consorcios con grandes constructoras nacionales (ACS-Dragados y Acciona, por un lado, y OHLA-Azvi-Rover, por otro). El montante de ejecución material de obra se situó en torno a 542 millones (sin IVA), dentro del paquete global de 653 millones que incluye otros contratos y servicios auxiliares. El calendario oficial habla de 36 meses de obra; hoy ya se ha escenificado la “primera piedra” y el arranque efectivo.
En términos urbanísticos, la Ciudad de la Justicia ocupará una parcela única de ~132.000 m² en Valdebebas, con una avenida de 300 metros y un parqueado perimetral que prioriza la movilidad peatonal y la conexión con el transporte público. La pieza urbana se completa con 40.000 m² de jardines —más que la Plaza de España— y una plaza de acceso pensada como espacio representativo.
Parcela y espacio público
El Gobierno regional reivindica que será “el mayor complejo judicial del mundo”, por delante del Justice Palace de Estambul (~300.000 m²), el Palazzo di Giustizia de Florencia (~135.000 m²) o el Tribunal de Justicia de París (~120.000 m²). Es una afirmación relevante en términos de escala, aunque conviene leerla con cautela metodológica: las comparaciones internacionales no siempre emplean el mismo criterio de “superficie construida” o incluyen del mismo modo zonas urbanizadas y dotaciones complementarias.
Más allá del hito de tamaño, el proyecto se juega su éxito en la gestión: contratos de dirección facultativa y una oficina de project management específicos deberán coordinar arquitectura, seguridad y fases de puesta en marcha para que el traslado de jurisdicciones sea ordenado y no interrumpa el servicio.















