Es una de las imágenes más compartidas en las últimas horas. Se trata de una fotografía que ha dejado sin aliento a la comunidad global: una osa polar de unos 300 kg se posa sobre el gigantesco cadáver de un cachalote macho que superaba las 40 toneladas. La fotografía, captada por Roie Galitz, ha dado la vuelta al mundo, sobre todo por las descomunales dimensiones de ambos protagonistas.
El festín imposible: una osa polar devora a un gigante del mar en el hielo ártico
Aunque a primera vista podría parecer un simple festín, la escena es en realidad una muestra cruda y fascinante del ciclo de vida en el Ártico. Según explica Galitz, la ballena fue arrastrada por corrientes oceánicas desde aguas más templadas hasta quedar varada sobre el hielo a 82° de latitud norte, un entorno extremo donde la supervivencia es una batalla constante.
In a rare sight, a female Polar bear, weighing at around 300kg (661lbs) feasts on a male Sperm Whale weighing over 40 tons, she looks so tiny. The whale was carried by the ocean currents and winds to its location from further south, near the continental shelf. pic.twitter.com/iCojRP2e51
— Nature is Amazing ☘️ (@AMAZlNGNATURE) November 18, 2025
Este tipo de encuentros no son habituales. Los osos polares suelen cazar focas, su presa habitual, pero no dudan en aprovechar cadáveres masivos como este cachalote cuando la oportunidad se presenta. Un solo cuerpo de tal tamaño proporciona una fuente energética enorme, crucial para un depredador que depende de cada bocado en un hábitat tan exigente.
La imagen ha generado un gran revuelo en redes sociales, donde usuarios destacan la paradoja de un superdepredador aparentemente diminuto frente a un coloso marino. El valor del fotógrafo también ha sido alabado: inmortalizar un momento así en un lugar tan inhóspito no es tarea fácil.
En palabras del propio Galitz: "En una escena poco habitual, una osa polar de 300 kilos se alimenta de un cachalote macho de más de 40 toneladas, ante el cual parece diminuta. Las corrientes oceánicas y los vientos arrastraron al cachalote hasta este lugar desde más al sur, cerca de la plataforma continental". Un encuentro que mezcla belleza, drama y naturaleza en estado puro, recordándonos que, incluso en los extremos del planeta, la vida sigue sus reglas más básicas: sobrevivir a cualquier costo.















