En los debates sobre gestión empresarial, es habitual hablar de modelos de producción, de márgenes de rentabilidad o de teletrabajo, pero rara vez se centra la atención en la figura que, de manera silenciosa, sostiene toda la estructura: el directivo. Ese responsable que debe garantizar que la organización no se descuelgue cuando la presión aumenta y los imprevistos golpean. La relación entre quien ocupa la cúspide y el resto de la dirección no se limita a cifras y objetivos; también depende de algo más intangible, pero decisivo: el grado real de implicación.
El empresario José Elías ha expuesto recientemente su visión sobre este asunto en la plataforma X, generando un debate intenso. No se trata de cuestionar políticas de conciliación o nuevas dinámicas laborales, sino de resaltar un rasgo que, según él, se ha vuelto escaso: la disposición inequívoca del directivo a asumir responsabilidades cuando la situación lo exige.
“De 45.000 empleados, solo 20 toman decisiones críticas”, confiesa el empresario José Elías
Para Elías, la dirección es un ejercicio de confianza mutua que trasciende los horarios convencionales. "Cuando llamo a mis directivos un sábado a las 11 de la noche, contestan al instante", afirma. No se trata de obligación, sino de un compromiso que define el estilo de gestión que considera adecuado. Y matiza: "Busco directivos que atiendan una urgencia a medianoche, pero que no estén en la oficina un lunes por acompañar a su pareja a una ecografía". La flexibilidad, explica, no es solo un beneficio para el empleado, sino un pacto de reciprocidad.
Elías gestiona un grupo con 45.000 empleados, aunque interactúa directamente con apenas 20, quienes ocupan los puestos clave. "A ellos no les pregunto si teletrabajan, ni si juegan al pádel un martes a las 4, ni si faltan un lunes por una cita médica. Pero cuando los necesito a medianoche, responden", dice. Para él, la independencia en la toma de decisiones estratégicas y la implicación en momentos críticos son inseparables.
Cuando llamo a mis directivos un sábado a las 11 de la noche, me cogen el teléfono a la primera.
— Jose Elías Navarro (@jose_elias_nvr) November 7, 2025
Siempre busco directivos que atiendan mis llamadas a las 11 de la noche si es que es una situación urgente, pero que no vengan un lunes si tienen que acompañar a su pareja a una…
El empresario subraya que este perfil de liderazgo es cada vez más raro. "Antes veía un 20% con verdadera capacidad de asumir responsabilidad; hoy diría que apenas un 5%", asegura. La clave, según Elías, no es la formación ni la experiencia, sino la actitud frente a la presión y la capacidad de asumir consecuencias.
Finalmente, destaca la confianza delegada: "Necesito alguien que trate mis compañías como si fueran suyas". Políticamente incorrecto, admite, pero esencial para él. Para Elías, liderar no significa estar siempre presente; significa equilibrar autonomía y responsabilidad compartida en un entorno que exige atención y criterio constante.















