El debate sobre las pensiones en España vuelve a la primera línea cada cierto tiempo, pero pocas veces con la claridad brutal de José Elías. El empresario catalán, conocido por su visión sin filtros, no duda en señalar que el país camina hacia un callejón sin salida si no se afrontan los problemas estructurales que atraviesan el mercado laboral, la vivienda y la demografía.
Su diagnóstico es crudo: "Los abuelos del futuro compartirán piso". Lo que hoy se vende como tendencia juvenil -coworking y coliving-, advierte, acabará siendo una necesidad para las generaciones mayores. "Llevamos años hablando de estas cosas como si fueran modas guays, pero en breve serán la única salida", afirma. Y su pronóstico aterra.
José Elías (49), multimillonario: “Con 800 euros de pensión, los abuelos del futuro compartirán piso en toda España”
Elías centra su preocupación en quienes hoy rondan los 50 años: "Gente que paga mil euros de alquiler, endeudada hasta las cejas y sin ahorros". La pregunta que se hace es inevitable: "¿Qué pasará cuando se jubilen?". Su respuesta no deja lugar a dudas: "Cobrarán pensiones de 800 euros y no podrán ni con el alquiler. Ahí es cuando tocará coliving con otros abuelos", comenta.
Para él, el problema no es coyuntural, sino estructural. La pirámide demográfica está invertida: cada vez menos trabajadores sostienen a más jubilados. "O hemos inventado lo de los panes y los peces, o aquí falta dinero", ironiza. Su crítica alcanza también al ámbito político. "Hablas con un político y te dice que no pasará nada. Claro, porque él no estará para verlo…", indica.
Elías no esquiva la crudeza, dejando claro el incierto futuro: "Llegará un momento en que no tendrán huevos a pagar las pensiones", advierte. Para entonces, gran parte de los españoles podría quedar desprotegida. El empresario pone especial atención en la cultura del alquiler. "A este país se le vendió la moto de que estar de alquiler estaba guay. Y sí, lo está si tienes la vida resuelta. Si eres pobre, tienes que comprar".
Para él, poseer una vivienda es la única garantía real para el futuro. "Es lo único que asegura que, al final de tus días, puedas vivir dignamente", concluye. Sea como sea, España necesita repensar su modelo antes de que las cifras y la demografía lo impongan por la fuerza.















