Ante la crisis de natalidad y la falta de mano de obra, Japón ha tenido que replantearse su histórica resistencia a la inmigración y abrir sus puertas a trabajadores extranjeros. Aunque el país ofrece numerosas oportunidades en sectores clave como el desarrollo de software, la construcción y el cuidado de ancianos, atraer talento del exterior se ha convertido en un desafío.
Las agencias privadas encarecen el proceso migratorio
No por falta de incentivos, sino por los elevados costos que imponen algunas agencias intermediarias encargadas de facilitar la adaptación de los trabajadores. Según una encuesta realizada por el gobierno japonés a más de 11.000 trabajadores extranjeros y 3.500 empresas, un 51,5% de los encuestados afirmó haber encontrado trabajo en Japón a través de estas agencias. Sin embargo, el 19,6% denunció que las tarifas que cobran son excesivas, representando un obstáculo para quienes desean emigrar. Estas tasas oscilan entre 1.200 y 2.400 euros, aunque en algunos casos pueden alcanzar hasta los 6.000 euros, una suma difícil de asumir para muchos aspirantes.
El problema radica en que muchas de estas agencias actúan como intermediarias sin una regulación clara, encareciendo el proceso sin ofrecer garantías de estabilidad laboral. La falta de transparencia ha hecho que muchos trabajadores reconsideren la posibilidad de mudarse a Japón, a pesar de la gran demanda de mano de obra. El gobierno japonés es consciente de la situación y ha comenzado a evaluar nuevas estrategias para mejorar las condiciones de contratación y reducir la dependencia de estas agencias privadas.
Los sectores con mayor demanda laboral
A pesar de los desafíos, Japón sigue necesitando cubrir miles de puestos en sectores estratégicos. La enseñanza de idiomas, la atención a personas mayores y el sector tecnológico figuran entre las áreas con más vacantes. Sin embargo, si no se toman medidas para garantizar un proceso migratorio más accesible y justo, la estrategia de Japón para atraer talento podría verse gravemente afectada.
Para quienes estén interesados en trabajar en Japón, los expertos recomiendan informarse bien y buscar alternativas más seguras. Optar por agencias gubernamentales y programas oficiales de empleo puede ser la mejor manera de evitar los costos abusivos y asegurar una transición más fluida al mercado laboral japonés.
