HBO ha dado un paso más en su ambicioso reboot de Harry Potter, mostrando por primera vez una escena inédita que no aparece ni en los libros ni en las películas originales. Las nuevas imágenes filtradas desde el set confirman que la serie televisiva expandirá el canon del universo mágico, incorporando momentos que solo se insinuaban en la saga literaria de J.K. Rowling.
En esta ocasión, las cámaras han captado al veterano actor John Lithgow —quien encarna a Albus Dumbledore— compartiendo escena con Nicolás Flamel, el legendario alquimista responsable de la Piedra Filosofal.
La aparición de Flamel marca un cambio notable respecto al primer libro y a la película de 2001. En Harry Potter y la piedra filosofal, el personaje era una figura casi mitológica: su nombre se descubría tras una investigación de los protagonistas y solo aparecía mencionado en una tarjeta de rana de chocolate.
Sin embargo, el rodaje filtrado muestra un encuentro directo entre Dumbledore y Flamel, una conversación que nunca llegó a describirse en la obra original. Esta decisión confirma lo que muchos esperaban: la serie no será una copia literal de los libros ni una recreación escena por escena de las películas, sino una reinterpretación más amplia del universo mágico. Lo cierto es que a muchos fans no les ha gustado la caracterización y la han acusado de ser exagerada, 'Parece una caricatura', comentaban algunos usuarios.
Dumbledore y Flamel: canon expandido
El proyecto de HBO, liderado por Warner Bros. Discovery, promete dedicar una temporada completa a cada libro y presentar a una nueva generación de actores. Los jóvenes Dominic McLaughlin, Arabella Stanton y Alastair Stout han sido elegidos como Harry, Hermione y Ron, respectivamente, en una producción de largo recorrido que aspira a durar una década. John Lithgow, conocido por su trabajo en The Crown y Dexter, aporta al nuevo Dumbledore una presencia más madura y serena, distinta a la de Richard Harris o Michael Gambon. Su interacción con Flamel, filmada en un despacho con luz de velas y decorado al estilo gótico, parece destinada a establecer desde el principio la relación entre el mago y el alquimista.
Esta expansión del canon no es un simple capricho, sino una estrategia narrativa coherente. A diferencia del formato cinematográfico, la serie tiene tiempo para explorar los huecos del relato original: las amistades de Dumbledore, los orígenes de ciertos artefactos mágicos o los eventos que preceden a la llegada de Harry a Hogwarts. Mostrar a Flamel en persona permite dar contexto al misterio de la Piedra Filosofal y reforzar la sensación de que el mundo mágico es más antiguo, profundo y conectado de lo que las películas pudieron mostrar. En palabras de un productor consultado por Collider, el objetivo es ofrecer a los fans “una historia familiar que se sienta nueva”.
Albus Dumbledore with Nicolas Flamel and his wife in the HARRY POTTER TV series
(via Terry Burton) pic.twitter.com/trO5tcLEND
— Wizarding World Direct (@WW_Direct) October 8, 2025
Nostalgia frente a reinvención
La comparación con las películas originales, sin embargo, será inevitable. Harry Potter y la piedra filosofal cumple 25 años en 2026, y Warner planea reestrenarla en cines justo cuando la nueva serie esté en plena promoción. Esa coincidencia creará un efecto espejo entre ambas versiones: una apelando a la nostalgia de quienes crecieron con Daniel Radcliffe, y la otra intentando conquistar a una nueva generación con un tono más pausado y fiel a los libros. Por eso, la decisión de ampliar el material es clave: repetir lo mismo sería redundante; reinventarlo con respeto puede ser su mejor baza.
La serie de Harry Potter en HBO tiene previsto estrenarse en 2027, con una producción que promete un despliegue visual a la altura de La casa del dragñon. El reto, claro, será doble: convencer a los fans veteranos sin traicionar la esencia de Hogwarts, y demostrar que, a más de 25 años del primer hechizo, el universo mágico todavía tiene rincones que merecen ser descubiertos.















