Es bastante común que veamos cómo Europa impone diversas sanciones a empresas tecnológicas de todo tipo por no respetar ciertas leyes o medidas en materias de seguridad, privacidad o monopolio, multas que suelen ser de un importe muy importante para los "mortales" pero que para el presupuesto de estas grandes compañías no suele significar demasiado.
Una de las pocas excepciones fue la multa que la UE impuso a Intel en el 2009 por supuestos abusos de monopolio en el mercado de procesadores, sancionando a la marca americana con una mult de la friolera de 1060 millones de euros.
Intel decidió presentar un recurso a la sanción que fue desestimado en junio del 2014 pero ahora, casi ocho años después, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha anulado la primera sentencia del 2009 tras detectar importantes errores de derecho ya que el análisis de la acusación no estaba completo y no permite demostrar jurídicamente los abusos de monopolio de Intel.
Esto se traduce en que la multa de 1060 millones de euros a Intel queda totalmente anulada y los siguientes pasos serán que el Ejecutivo recurra esta sentencia o que el proceso de la acusación se reinicie por completo.
🚨 #URGENTE | El TJUE tumba la multa de 1.000 millones a Intel por abusos monopolísticos https://t.co/uzR2mnFGfz
— Invertia (@Invertia) January 26, 2022
Los motivos por los que se acusó a Intel
Tal y como nos cuenta en Español, cuando la UE impuso la multa a Intel se concluyó que la marca había aplicado entre los años 2002 y 2007 "una estrategia destinada a excluir a los competidores del mercado. En particular, la compañía ofrecía agresivos descuentos a cuatro fabricantes de equipos informáticos -Dell, Lenovo, Hewlett-Packard y NEC- a condición de que le compraran a ella la totalidad o la casi totalidad de los procesadores x86", provocando el abuso de poder y monopolio que acabó con esa cuantiosa multa... de la que Intel se ha librado, al menos por ahora.