El Cosmere es un universo lleno de grandes obras de Brandon Sanderson que se ha convertido por méritos propios en uno de los autores de fantasía épica más importantes de los últimos años construyendo todo un fenómeno de masas que tiene cautivos a millones de lectores en todo el mundo.
Por su gran ritmo de publicación y la longitud de algunas de sus obras podría parecer que para Sanderson es "fácil" escribir, plasmar sus ideas, historias y sus mundos en el papel para hacerlos llegar a los lectores pero nada más lejos de la realidad ya que el camino de la creación de este universo está lleno de detalles, anéctodas y problemas de todo tipo que ha tenido que ir solventando durante todo este tiempo.
Kaladin fue el motivo de no publicar durante un tiempo El Camino de los Reyes
En uno de los últimos vídeos en su canal de YouTube el propio Sanderson nos habla de uno de esos "problemas" a los que ha tenido que enfrentarse en la creación del Cosmere y, más concretamente, para sacar adelante El Camino de los Reyes, la novela inicial de El Archivo de las Tormentas que es la saga más importante dentro del Cosmere.
El problema no fue otro que la creación de Kaladin, uno de los personajes más importantes de su obra que, al principio, tenía un trasfondo un tanto genérico ya que creyó que le sentaría bien como forma de introducir a los lectores a su obra dado que está pensado como la vía de acceso a la misma pero, en cierta manera, también es "el líder de El Archivo de las Tormentas" por lo que finalmente esta idea inicial de trasfondo genérico no acabó de funcionar.
"Este no es un mundo genérico, El Archivo de las Tormentas es mi intento de mostrar más el lado de ciencia ficción de lo que podría ser la fantasía y llevar el mundo más lejos y nunca publiqué El Camino de los Reyes al menos no durante la primera parte de mi carrera porque no estaba satisfecho con él", comenta Sanderson haciendo referencia a Kaladin.
La solución para mejorar el trasfondo de Kaladin llegó tiempo más tarde. En plena reflexión sobre el personaje Sanderson comenzó a leer sobre las vidas de los cirujanos durante el fin de la Edad Media y el inicio del Renacimiento en la que eran "parte científicos, parte médicos y en gran medida eran temidos. El cirujano realmente conocía el cuerpo y eso era una especie de tabú y pensé en cómo sería vivir como un cirujano durante una de estas épocas y también se me ocurrió un día de qué pasaría si fueses un cirujano y terminases en la guerra y descubrises que el mismo tipo de habilidades que te convirtieron en un cirujano bastante bueno también te convierten en un carnicero y descubres ae también eres bueno como soldado. Eres bueno curando, eres bueno matando y esa dicotomía comenzó a convertirse en el núcleo de Kaladin".
