Las playas de Málaga son un lugar ideal para relajarse y disfrutar del verano, pero es importante conocer y respetar las normativas locales para evitar sanciones. La ordenanza de uso y disfrute de las playas de Málaga establece claras normas para garantizar la convivencia y la tranquilidad de todos los visitantes. Entre las conductas prohibidas se incluye orinar en el mar, escuchar música a través de un altavoz y jugar a las palas o con la pelota, acciones que pueden resultar en multas de hasta 3.000 euros. Si, varias de las cosas que sueles hacer en la playa podían haber acabado en multa.
Ni jugar a las palas ni a la pelota
Una de las prohibiciones más sorprendentes es la de jugar a las palas, un pasatiempo veraniego común. El artículo 6 de la ordenanza prohíbe actividades, juegos o ejercicios que puedan molestar a otros usuarios durante la temporada de baño, del 1 de junio al 30 de septiembre. Esta infracción puede resultar en multas que van desde los 300 hasta los 3.000 euros. No obstante, existen excepciones, como realizar estas actividades a una distancia mínima de seis metros de otros bañistas o en zonas designadas por el Ayuntamiento.
¿En qué playas se puede jugar a las palas?
En Santander, estas limitaciones se detallan en la cartelería de las playas, donde también se señalizan las zonas de juego con balizas azules. La ordenanza local destaca que los usuarios suelen respetar estas áreas designadas, lo que minimiza las incidencias y facilita la convivencia en las playas.
En Vigo, la normativa prioriza actividades como el paseo, la estancia y el baño sobre cualquier otra. No obstante, se permite la práctica de juegos de pelota, palas o vóley playa, siempre que no molesten a los demás usuarios y que el tamaño de la playa lo permita. Esta regulación busca equilibrar el disfrute de todos los visitantes y asegurar un entorno tranquilo y ordenado.
En Benidorm, las actividades como los juegos de pelota y paletas están permitidas bajo la condición de no causar molestias y siempre que la dimensión de las playas lo permita. El incumplimiento de estas ordenanzas, generalmente consideradas infracciones leves, puede resultar en multas que oscilan entre los 300 y 750 euros. Sin embargo, en casos de reincidencia o desobediencia a las autoridades, las sanciones pueden llegar hasta los 3.000 euros, destacando la importancia de seguir las normas establecidas para el uso adecuado de las playas.
Tampoco se pueden hacer barbacoas, llevar animales o pescar
Las normativas también contemplan sanciones por otras infracciones graves como hacer barbacoas en lugares no permitidos, llevar animales a la playa sin autorización o pescar en zonas y horarios no autorizados. La venta ambulante de alimentos y el uso indebido de instalaciones públicas como duchas (ducharte con el agua y el jabón de tu casa) y aseos también pueden resultar en multas significativas. Estas medidas buscan mantener la higiene y el orden en las playas, asegurando una experiencia agradable para todos.
Ni pis ni caca en el agua y ni en la arena
El tema de la higiene es particularmente estricto. La ordenanza prohíbe expresamente la evacuación fisiológica en el mar o en la playa, una infracción considerada leve que puede resultar en multas de hasta 300 euros. Aunque la regulación no especifica cómo se controla esta conducta, la sanción está diseñada para disuadir comportamientos que afecten la limpieza y la salud pública de las zonas de baño.
Bañarse con bandera roja
Además de las normativas específicas de Málaga, es importante destacar que cada municipio en España puede tener sus propias reglas para el uso de playas y espacios al aire libre. Por ejemplo, bañarse con bandera roja puede acarrear multas de hasta 750 euros, y ducharse con jabón en la playa está prohibido por razones ecológicas. En algunas regiones, incluso fumar está prohibido en playas designadas como "libres de humos".
