Friends una serie atemporal para millones de espectadores en todo el mundo. Han pasado casi tres décadas dede debutara en nuestras pantallas en un lejano septiembre de 1994, convirtiéndose rápidamente en una de las comedias de situación más icónicas de todos los tiempos. Su legado, como hemos visto en los últimos tiempos, es incalculable. Con su mezcla de ingenio, ternura y personajes entrañables, Friends se ganó un lugar en la cultura popular que perdura hasta hoy. Pero en los últimos tempos, Jennifer Aniston, quien interpretó a la inolvidable Rachel Green, ha revelado algunas grietas en el humor de la serie y ha destapado graves problemas y oscuros secretos sobre el enfoque de la sitcom.
'No lo pensamos demasiado bien': El humor de 'Friends' ha envejecido mal y Jennifer Aniston confiesa que la serie era muy ofensiva cuando se estrenó
En una entrevista, en consonancia al sentimiento general que pesa sobre la serie, y del que alguna vez nos hemos hecho eco, Aniston reflexionó sobre cómo la comedia ha cambiado desde la época de Friends. "No todos los chistes hacen la misma gracia que entonces", admitió la actriz, señalando que el contexto social y las sensibilidades de los años 90 eran muy diferentes a las de la actualidad. Aniston reconoció que algunas de las bromas y situaciones que en su momento parecían inocuas o incluso educativas -al menos cuando se escribieron y emitieron-, ahora se perciben como ofensivas por las nuevas generaciones que descubren la serie.
Volvamos la vista atrás. La comedia de los 90, y en particular Friends como máximo exponente del género de la comedia de situación más tradicional, se construyó sobre una base de humor que a menudo rozaba la línea de lo políticamente correcto, utilizando estereotipos y bromas sobre temas como la diversidad, los roles de género y la orientación sexual.
Aunque en su momento estos chistes se podían entender como una forma de satirizar o criticar ciertas actitudes, la evolución de la sensibilidad social ha llevado a muchos a reconsiderar su impacto. Son temas muy delicados para una parte de la sociedad actual.
"Ahora hay que tener mucho cuidado", comentó Aniston, quien subrayó que el humor de hoy en día requiere una mayor consideración de sus consecuencias. Lo que antes se veía como una forma de "educar a la gente sobre lo ridículo que era el comportamiento intolerante", ahora se enfrenta a un escrutinio más severo e incluso visceral. "Las nuevas generaciones encuentran la serie ofensiva, y no les falta razón", reconoció la actriz. "Había cosas que nunca fueron intencionadas y otras que, bueno, deberíamos haber pensado mejor", admite la intérprete. De hecho, Aniston considera que uno de los aspectos más criticados de Friends, la falta de diversidad en su reparto o el retrato a menudo unidimensional de los roles de género, puede incluso llegar a estar bien señalado por los espectadores actuales.
A pesar de estas críticas, Aniston defiende la importancia del humor y su papel en la sociedad. "¡Todo el mundo necesita humor! ¡El mundo necesita humor!", exclamó, señalando que la división social que se vive en lugares como Estados Unidos hace que la comedia sea más necesaria que nunca. El revisionismo televisivo es un tema complejo, ya que los propios creadores de la ficción se han defendido afirmando que, simplemente, hicieron una serie en base a sus experiencias y entornos, sin intentar dar lecciones ni aparentar nada más. En un mundo donde el humor sigue evolucionando y adaptándose a nuevas realidades de las que podemos ser testigos en las calles de nuestras ciudades o localidades, Friends permanece como un recordatorio de una era distinta, con su legado cultural intacto pero no exento de la crítica que el paso del tiempo inevitablemente trae consigo.
