James Cameron es uno de los cineastas más influyentes de la industria de Hollywood. Habiendo parido proyectos como 'Terminator', 'Titanic' o 'Avatar', el productor, guionista y director especializado en ciencia ficción no es del agrado de todos y parece que es un poco complicado trabajar con él. Roland Emmerich, autor de filmes como 'Independence Day' aseguró en la reciente San Diego Comic-Con que el también responsable de 'Aliens' es un déspota, y eso da respuesta a por qué el remake de 'Viaje alucinante' sigue sin poder desarrollarse de forma eficaz.
James Cameron sería el principal problema del desarrollo de 'Viaje alucinante': Roland Emmerich tacha a su compañero de 'déspota'
En 1966, Richard Fleischer estrenó un proyecto histórico dentro de la ciencia ficción que transcurría en el interior de un científico enfermo: 'Viaje alucinante'. Dicho filme, que ha sido reinterpretado y hasta parodiado en otros largometrajes del género a lo largo de los años, jamás ha tenido un remake, y parece que la cosa va para largo.
James Cameron quiso poner en marcha esa revisión contemporánea del proyecto hace tiempo y Roland Emmerich fue elegido como director a cargo, pero parece que el creador de Pandora impuso demasiado su creatividad y el filme cayó en el olvido: "James Cameron es un déspota, y yo, llegado un punto, me rendí. Porque me preguntaba; '¿Es tu película o mi película?'. Estábamos en la primera etapa. Tengo que decir que yo hago mis cosas, y cuando no puedo hacerlas, no estoy interesado", comentaba Emmerich.
"Es así de simple. Así que cuando alguien quiere decirme algo y es más poderoso que yo, me bajo del proyecto". No es la primera vez que se escucha algo similar en Hollywood relacionado con el mainstream, pero sorprende un poco viniendo de parte de James Cameron si Emmerich está en lo cierto. En cualquier caso, el remake de 'Viaje alucinante' sigue en pausa buscando equipo creativo que quiera hacerse cargo de la película. Paul Greengrass, Shawn Levy y Guillermo del Toro intentaron desarrollar el proyecto, pero la cosa tampoco acabó bien.
