Casi todos usamos tarjetas de crédito o de débito para comprar en nuestro día a día. No es nada nuevo. Sin embargo, la facilidad con la que distribuimos nuestros datos por internet hacen que debamos ser extremadamente cuidadosos con su uso. En particular, la selección de un código PIN adecuado es fundamental para proteger nuestras compras, cada vez más orientadas al llamado ecomerce. Si bien las tarjetas suelen venir con un PIN preestablecido, muchos usuarios optan por cambiarlo a uno que les resulte más fácil de recordar. Error. Esta facilidad de memorización puede traducirse en una mayor vulnerabilidad ante los delincuentes.
Si tienes uno de estos PIN en tu tarjeta, cámbialo: tu dinero está en peligro y los expertos reclaman mayor concienciación en ciberseguridad
Los ciberdelincuentes que recurren al ‘carding’ (uso no autorizado de datos de tarjetas de crédito) a menudo se benefician de la previsibilidad de los PIN. Aunque los PIN están compuestos por solo cuatro números y las combinaciones posibles son miles, algunos patrones son increíblemente comunes.
Un estudio realizado por un antiguo científico de datos de Facebook reveló que casi el 11% de más de tres millones de contraseñas analizadas repetían el patrón 1234.
Es curioso, pues entre los números más elegidos destacan las repeticiones de números (0000, 1111 y 4444, entre otros), los números consecutivos (1234 y 4321) y otros como el 6969. Otro PIN muy utilizado, aunque no está en el top 20, es el 2580, una secuencia de números que se encuentran alineados verticalmente en el teclado numérico. Ante el creciente riesgo de robos de dinero en internet, es crucial que los usuarios tomen medidas de seguridad para proteger sus transacciones, por lo que los expertos instan a que se usen PIN complejos, evitando las combinaciones simples, optando por números aleatorios que no sigan patrones evidentes, actualizándola cada pocos meses.
Otro elemento diferenciador radica en la llamada Autenticación de Dos Factores (2FA), una capa extra que permite al usuario identificarse en distintos medios -SMS, correo electrónico o con herramientas biométricas como escaneo facial- y que ayuda a reforzar las transacciones y compras por internet. También se recomienda revisar regularmente los estados de nuestra cuenta bancaria para detectar cualquier actividad sospechosa de inmediato, comunicándoselo al banco a la mínima duda que tengamos.
También, el realizar compras y transacciones solo desde redes seguras, evitando el uso de Wi-Fi público es algo a considerar, sobre todo si tenemos en cuenta cómo operan los estafadores y hackers. En un mundo cada vez más digital, la seguridad de nuestras transacciones depende de nuestra diligencia y precaución. Adoptar estas medidas puede marcar la diferencia entre ser una víctima de fraude y mantener nuestras finanzas seguras.
Los PIN más utilizados y los que debemos evitar para que no nos roben el dinero
Los siguientes son algunos de los PIN más comúnmente utilizados, los cuales son también los más fáciles de descifrar para los delincuentes:
- - 1234
- 1111
- 0000
- 1212
- 7777
- 1004
- 2000
- 4444
- 2222
- 6969
- 9999
- 3333
- 5555
- 6666
- 1122
- 1313
- 8888
- 4321
- 2001
- 1010
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