George R.R. Martin, el aclamado creador de la saga Canción de hielo y fuego, en la que se basó la serie Juego de Tronos, recientemente ha compartido sus reflexiones sobre el desafío que representa para él lidiar con el fandom de la serie y de sus libros, haciendo hincapié en la toxicidad que ve a diario en las redes sociales.
A través de una publicación en su blog, Martin destaca cómo la toxicidad ha permeado incluso los espacios que antes eran refugios para el intercambio apasionado y respetuoso sobre libros, películas y series de televisión. La tendencia actual, inflamada por las dinámicas de las redes sociales, parece favorecer las voces de aquellos que se identifican más con lo que odian que con lo que aman.
Esta situación se presenta como un obstáculo significativo para el autor, especialmente en vísperas de la publicación de los dos títulos restantes de su saga de Canción de hielo y fuego. La negatividad predominante en las plataformas digitales hace que sea cada vez más difícil para Martin, y para creadores en general, interactuar de manera significativa con sus audiencias.
Se da más importancia a los comentarios negativos
"Bueno, busco consuelo donde puedo. En tronos de chocolate, si no hay en otro lugar. En libros. En películas y programas de televisión", confesó el escritor y guionista. "Aunque incluso allí, la toxicidad está creciendo. Solía ser divertido hablar sobre nuestros libros y películas favoritos, y tener debates animados con fans que veían las cosas de manera diferente, pero de alguna manera en esta era de las redes sociales, ya no es suficiente decir, 'No me gustó el libro X o la película Y, y aquí está el porqué'. Ahora las redes sociales están dominadas por anti-fans que prefieren hablar sobre las cosas que odian en lugar de las cosas que aman, y se deleitan bailando sobre las tumbas de aquellos cuyas películas han fracasado", sentencia Martin.
Esta atmósfera ha transformado el diálogo cultural en un campo minado para los creadores, donde el fracaso de una obra puede convertirse en motivo de escarnio público, en lugar de una oportunidad para el debate constructivo o la crítica reflexiva. Su saga de libros, en especial Vientos de invierno, su próximo libro, se encuentran en una posición particularmente delicada. Tras más de una década en desarrollo, el progreso del libro se ha visto afectado no solo por el involucramiento de Martin en la adaptación televisiva de HBO, sino también por la presión adicional que la reacción negativa de los fans podría estar generando. Este entorno hostil no solo presenta desafíos para la finalización de la obra, sino que también podría influir en la recepción crítica del libro, con fans potencialmente esperando que Martin "corrija" los aspectos que consideraron erróneos en la serie de televisión.