El mundo de la arqueología está que no para, incluso en navidades. No es que tengan miedo de seres peludos con cuernos, pero la verdad es que esta semana ha sido interesante en este campo científico. Después del descubrimiento casual de vestigios anasazi en Norteamérica, ahora, por una mera coincidencia, se ha hallado un tesoro cultural de hace miles de años en Canadá.
El deshielo revela un tesoro cultural de hace 7.000 años en Canadá
El descubrimiento, compartido por BigThink, ha tenido lugar en Mount Edziza, un parque provincial en la zona norte de Canadá. Ha sido un deshielo histórico lo que ha permitido a Duncan McLaren, responsable del equipo de investigación, dar con objetos de la Primera Nación Tahltan, que habitó la zona hace más de 7.000 años. Esto hace que millones de monedas de oro parezcan poca cosa en comparación, siendo sinceros.
Los Tahltan (que siguen existiendo como pueblo hoy día) usaron esas regiones como zonas de caza, lo que ha permitido sacar un total de 56 objetos de 9 puntos hasta el momento congelados e inaccesibles y que han sido encontrados por casualidad, ya que en realidad los arqueólogos, investigadores y miembros de los grupos locales Tahltan que han participado no sabían que estuvieran ahí.
"Había una densidad muy alta de artefactos", explica McLaren. "Sabíamos que había obsidiana, pero no fuimos conscientes hasta que terminamos con el proyecto de que había todos estos artefactos orgánicos, preservados alrededor de la obsidiana". El investigador se refiere a todos los elementos hallados y que hablan de la vida de la tribu por aquel entonces, entere los que destacan varios contenedores, algunos reforzados (quizás para transportar piezas abatidas), restos de ropa que señala podrían mostrar que se preparaban para el frío e incluso un pico para el hielo.
Ahora, el plan es crear un museo donde exhibir todas estas piezas, que según explica el equipo, han podido conservarse gracias en gran parte a lo remoto del lugar y lo inhóspito del clima.
