Jonathan Majors, conocido por su papel como Kang el Conquistador en el Universo Cinematográfico de Marvel (MCU), ha sido declarado culpable de agresión y acoso en un juicio por violencia doméstica en Nueva York. Este veredicto ha llevado a Marvel Studios a decidir no continuar con Majors en futuras producciones del MCU, informa Variety.
Majors había interpretado a este importante villano en varias fases del MCU, incluyendo su debut en la primera temporada de Loki en 2021 y su participación en la película Ant-Man y la Avispa: Quantumanía, que obtuvo una recaudación mundial significativa. Tras el juicio, que reveló un "ciclo de abuso psicológico y emocional" por parte de Majors, varias agencias y representantes han terminado su relación profesional con él.
Este hecho representa un giro significativo en la carrera de Majors, quien estaba en ascenso tras su éxito en películas como Creed III. Marvel Studios ahora se enfrenta al desafío de decidir el futuro del personaje de Kang en el MCU, debatiendo entre mantener al personaje con un nuevo actor o cambiar el enfoque de la trama en las próximas fases.
Una carrera que estaba en ascenso
El juicio contra Majors, que incluyó evidencia de mensajes de texto incriminatorios y un audio, resultó en su condena por dos cargos menores de acoso y asalto. Estas acusaciones han tenido un impacto significativo en la carrera de Majors, llevando a su despido de varios proyectos importantes y poniendo en duda el lanzamiento de películas como Magazine Dreams, en las que había participado.
Su papel como figura central en la Saga del Multiverso de Marvel, particularmente en películas futuras como Vengadores: The Kang Dynasty, queda ahora en el aire.
La salida de Majors de Marvel Studios plantea desafíos creativos y financieros para el estudio, especialmente dada la naturaleza interconectada del MCU. Con la posible reconfiguración de la Saga del Multiverso y decisiones críticas sobre la recolocación del papel de Kang o la introducción de un nuevo villano, Marvel se encuentra en una encrucijada. Este cambio no solo afecta las futuras producciones de Marvel, sino también la percepción del público y la coherencia narrativa en una de las franquicias cinematográficas más exitosas del mundo.