No hay que esperar demasiado para que le sirvan a uno el pedido cuando va a comer a algún McDonald's. La comida suele aparecer en cuestión de minutos, toda montada y perfecta (en la mayoría de ocasiones), sobre la mesa como si se hubiera cocinado por arte de magia. No solemos ver la cadena de montaje que se sigue en las cocinas de esta fábrica de comida rápida, pero gracias a un trabajador en particular, Stephen Patula, hemos podido comprobar cómo es realizar una jornada en hora punta en un McDonald's. Aunque pueda parecer fácil montar hamburguesas, no lo es teniendo en cuenta la velocidad a la que se van sacando todos los pedidos.
Una GoPro y una jornada intensiva, la muestra perfecta de cómo funcionan los pedidos
Si alguna vez habéis visto la película de El Fundador, protagonizada por Michael Keaton, entonces conoceréis de sobra el proceso que se sigue para montar las diferentes hamburguesas que hay disponibles en McDonald's, a pesar de que las principales en ese largometraje son simplemente las cheeseburguer habituales. Como podéis ver en la cámara de Patula, es un no parar. Hay que estar pendiente de mil elementos y no olvidar ninguno, siguiendo a rajatabla el montaje para que el sistema funcione como un tiro y no haya problemas en el rendimiento.
El vídeo se ha rodado con una GoPro atada a la cabeza del usuario y parece casi un found footage muy frenético en el que no se da un respiro al espectador. Resulta hasta agobiante pensar que hay que estar pendiente, en tan poco tiempo, de tantos ingredientes. El mínimo error hace que el proceso se tenga que repetir y por tanto el pedido sale más tarde, retrasando así a los otros que hay en cola. McDonald's tiene una cadena de montaje para la comida que nos ha alucinado. Seguro que después de esto querréis ver cómo es el espectáculo en directo.
