Son las palabras de moda: metaverso y realidad aumentada. Desde hace unos años, llevamos escuchando rumores sobre distintas aproximaciones a esta tecnología, que pretende fusionar la realidad con el espacio que ocupa internet para revolucionar para siempre nuestras vidas. Aunque esto entraña peligros evidentes, no son pocas las compañías que han decidido diseñar soluciones tecnológicas en los wereables.
Con Facebook y Ray-Ban liderando el cambio, Apple no quiere quedarse atrás. Según filtraciones, sus gafas llegarán en 2022 siendo especialmente rompedoras al funcionar de manera independiente y aprovechar la potencia del procesador de los nuevos Mac, el chipset M1 en una variante aún más equilibrada y ajustada en términos de potencia y gasto energético.
Apple volverá a sorprendernos a todos con un diseño tecnológico superior en realidad aumentada
Así lo confirmado el analista Ming-Chi Kuo, uno de los filtradores más reputados y célebres de las tecnologías de Cupertino a lo largo de los años. Según Kuo, estas gafas incluirán dos procesadores de tamaño reducido, uno con la misma capacidad de procesamiento que los chips M1 de los modelos Mac más recientes, y otro de menor capacidad y velocidad que sería el responsable de procesar y manejar la información registrada del exterior a través de los sensores incorporados en el dispositivo.
Según Kuo, en Apple han trabajado especialmente en este último punto, ya que sus gafas tendrían entre 6 y 8 módulos ópticos que trabajarían en simultáneo y de forma constante -basados en LIDAR- para captar vídeo de nuestro mundo real y retransmitirlo al mismo tiempo en las pantallas del interior de los cristales.
La potencia obtenida en las pruebas del M1 permitirían Apple desprenderse de cualquier tipo de conexión obligatoria con el iPhone, otorgándoles la capacidad de operar y funcionar sin tener que estar enlazadas de forma constantes a ningún otro dispositivo de la manzana. Sin embargo, hay rumores de que para portar estas gafas sería necesario llevar con nosotros un dispositivo extra, pequeño y similar a los AirPods, que se encargaría de registrar todas las acciones. Para Kuo, estas gafas no están desarrolladas por Apple como un accesorio. Sus fuentes aseguran que no hay conexión obligatoria con ningún dispositivo, y que funcionarán de forma independiente, con su propio ecosistema y sus propias apps. ¿Qué podremos hacer con ellas? Pues todo lo que ya hacemos con nuestro teléfono y aquello que nos prometieron con Google Glass hace casi diez años pero que no se llegó a concretar.
Además, serán rompedoras a nivel de hardware. Incorporarán un par de pequeñas pantallas OLED de resolución 4K fabricadas por Sony, que permitirán visualizar todo lo que ocurra a nuestro alrededor a la máxima calidad posible. Según Ming-Chi Kuo, las gafas se presentarían en 2022, aunque se desconoce cuál será su fecha de venta. ¿Su precio? Los rumores hablaban de 499 dólares en su modelo más básico, pero no hay nada oficial, pues otras filtraciones suben bastante más esta etiqueta relativa al precio.
