Casi todas las semanas se descubren animales prehistóricos y dinosaurios de todo tipo. Es algo habitual que los paleontólogos anuncien con bombo y platillo todos sus descubrimientos y hallazgos, cuando algunos de ellos son poco comunes y estrafalarios. En este ámbito, el Museo Nacional de Rio de Janeiro anunció el pasado jueves el descubrimiento de una nueva especie de dinosaurio, extremadamente raro, una especie de terópodo "sin dientes" que vivió hace unos 80 millones de años en el sur de Brasil.
Así es el Berthasaura leopoldinae: un dinosaurio pequeño y especial
Esta particular especie de dinosaurio se trata de un terópodo (bípedo), de tamaño pequeño con aproximadamente 1 metro de longitud y 80 centímetros de altura, que según relatan desde Infobae, se ha identificado tras analizar un conjunto de fósiles hallados en el municipio Cruzeiro do Oeste, en el estado de Paraná, entre 2011 y 2014. "Aunque pertenece a los terópodos, donde predominan formas carnívoras provistas de dientes, Berthasaura poseía un pico córneo, sin dientes (...), distinto a todas las especies encontradas en el país hasta ahora", explica desde el Museo Nacional, gestionado por la Universidad Federal de Rio de Janeiro (UFRJ).
El estudio, realizado en colaboración con el Centro Paleontológico de la Universidad do Contestado (Cenpaleo), fue publicado este jueves en la revista científica Nature, y ha sido calificado como una especie "muy rara".
"Tenemos restos de cráneo y mandíbula, columna vertebral, cinturas pectoral y pélvica y miembros anteriores y posteriores, lo que hace de ‘Bertha’ uno de los dinosaurios más completos encontrados en el periodo Cretáceo brasileño", explicó el paleontólogo Alexander Kellner, que destacó el buen nivel de conservación de los fósiles encontrados. "Esto de los dientes levanta ciertas dudas sobre el tipo de dieta del animal", confirma Geovane Alves Souza, alumno de doctorado de la UFRJ y uno de los autores del estudio.
"Esto no quiere decir que por no tener dientes no pueda comer carne, ya que muchas aves, como el halcón y el buitre, lo hacen. Lo más probable es que fuera un animal omnívoro, ya que el ambiente era inhóspito y necesitaba aprovechar lo que tenía disponible", continuaba Souza. Es decir, este dinosaurio intentaría sobrevivir en un entorno peligroso, de cierta escasez de alimentos. El animal, bautizado como Berthasaura leopoldinae, ha sido nombrado así en homenaje a Bertha Lutz, una eminente científica brasileña muy ligada al Museo Nacional y a la emperatriz Maria Leopoldina, esposa del emperador Pedro I de Brasil.
