Las Roombas han ayudado a desprendernos de ciertas tareas que antes podían llevarnos cierto tiempo, como es la limpieza del suelo de nuestro hogar. Sin embargo, estos aparatos no son perfectos -o no lo eran, mejor dicho- por el simple hecho de que se podían chocar con ciertos objetos como muebles e incluso, en el peor de los casos, los regalitos a modo de excrementos que dejan algunas mascotas en los suelos. Decid adiós al drama, ya que la empresa iRobot ha puesto punto y final a estos incidentes con unos nuevos modelos capaces de identificar objetos y esquivarlos a tiempo (vía Gizmodo).
Los nuevos modelos de Roomba reciben el nombre de iRobot Roomba J7 y J7+ y son versiones más estilizadas de los modelos más económicos de iRobot. Superficialmente pueden parecer idénticas al resto de Roombas, aunque los cambios mayores provienen de sus entrañas, ya que se ha mejorado enormemente el sistema de cámaras para esquivar mejor los obstáculos.
En el caso del modelo J7+, el depósito es más pequeño, aunque esta limitación permite que pueda acceder a espacios más estrechos y viene de serie con una torre de vaciado, cosa que no ocurre con el J7, que solo viene con el cargador de suelo corriente. No debemos pasar por alto un detalle clave, y es que estas nuevas aspiradoras inteligentes permitirán recibir ciertas actualizaciones para aumentar sus posibilidades, como designar zonas de limpieza específicas o delimitar las áreas de entrada prohibidas.
Mayor interacción con el usuario, precios y disponibilidad
Por supuesto y como os destacábamos al principio, las cámaras mejoradas mejoran la calidad de vida de los usuarios, quienes no tienen que preocuparse de retirar posibles obstáculos (calcetines, juguetes, excrementos) que puedan interferir en el proceso de limpieza. Para los dueños de animales de compañía, especialmente los perros jóvenes, se acabó el tener que limpiar las estelas de excrementos esparcidas por la Roomba. Cabe destacar que este nuevo sistema permite una mayor interacción con el usuario, ya que responde a órdenes de voz para limpiar salas en específico y envía fotografías para que podamos decidir si la aspiradora debe o no evitar el obstáculo con el que se topa en su camino.
Claro está que, con todas estas adiciones, los nuevos modelos de Roomba salen algo más caros de lo normal. El modelo J7 sin la base de vaciad se vende a 649 dólares, mientras que la J7+ cuesta 849 dólares. Sin embargo, podéis estar tranquilos, ya que desde iRobot confían tanto en las nuevas capacidades de ambas aspiradoras inteligentes que prometen reemplazos sin coste adicional en caso de que estas no cumplan debidamente con sus funciones, lo que en otras palabras viene a significar que, si se tragan una caca, os la cambian gratuitamente. Ya se pueden reservar vía online en Estados Unidos y Canadá y su salida se producirá el 12 de septiembre.