Un hallazgo sin precedentes ha encendido las alarmas en el mundo de la ciencia y la salud pública: por primera vez, se ha confirmado la presencia del virus del Nilo Occidental (VNO) en conejos silvestres y liebres ibéricas en España. Este descubrimiento, revelado por un reciente estudio, plantea serios interrogantes sobre el papel de estas especies en la propagación de enfermedades zoonóticas y podría redefinir las estrategias de vigilancia en los ecosistemas mediterráneos.
El virus del Nilo Occidental: una amenaza silenciosa que amenaza a la fauna de España
El virus del Nilo Occidental, perteneciente a la familia Flaviviridae, es transmitido principalmente por mosquitos y constituye una de las principales causas de encefalitis arboviral en humanos a nivel mundial. Hasta ahora, en España se había identificado su presencia en especies como rumiantes, zorros y jabalíes, pero nunca en conejos, liebres o picas. Este hecho amplía de manera significativa el conocimiento sobre los hospedadores potenciales del virus y subraya la necesidad de reconsiderar su vigilancia en la fauna silvestre.
El estudio, realizado por un equipo multidisciplinar de la Universidad de Córdoba, el Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA-INIA) y la Junta de Andalucía, analizó un total de 540 lagomorfos silvestres (399 conejos y 141 liebres) recolectados entre 2018 y 2023 en distintas regiones de Andalucía. Los resultados fueron concluyentes: un 5% de los animales mostraron anticuerpos contra flavivirus, y en pruebas específicas de microneutralización, se confirmó la exposición al VNO en un 4,8% de los conejos y un 0,7% de las liebres.
Vejer de la Frontera: epicentro de un brote histórico que preocupa a la comunidad científica
El mayor número de casos se registró en septiembre de 2020 en un coto de caza ubicado en Vejer de la Frontera, Cádiz, coincidiendo con el brote más importante de VNO documentado en España, que afectó tanto a humanos como a caballos. Este hallazgo refuerza la teoría de una distribución heterogénea y estacional del virus en los ecosistemas mediterráneos, con periodos de mayor incidencia vinculados a factores ambientales y climáticos.
Aunque las liebres y los conejos no parecen tener un papel clave en la transmisión del VNO, los investigadores destacan su potencial como especies centinelas. “Estos hallazgos subrayan la necesidad de reforzar la vigilancia en las poblaciones de fauna para comprender mejor la dinámica de transmisión de los flavivirus y orientar las intervenciones en salud pública”, afirmó el doctor Ignacio García-Bocanegra, líder del equipo de investigación.
Este trabajo marca un hito en la comprensión de la interacción entre la fauna silvestre y las enfermedades emergentes. Por primera vez, se documenta la exposición al VNO en conejos silvestres en España y liebres ibéricas a nivel mundial. Este avance abre nuevas líneas de investigación y recalca la necesidad de estrategias integradas que incluyan a la fauna silvestre en los programas de vigilancia epidemiológica para prevenir futuros brotes.