¿Os imagináis que un restaurante de comida rápida, con una red logística sólida e importante se quede sin unidades o existencias de sus productos más demandados? Pues eso ha pasado en los McDonald's de Reino Unido durante los últimos días. Sus establecimientos han dejado de vender batidos y bebidas embotelladas en unos 1300 restaurantes del Reino Unido, causando la indignación de clientes y ciudadanos. Según explica CNN, los restaurantes más afectados han sido los de Inglaterra, Escocia y Gales, y se debe a una escasez de personal y de retrasos en la cadena de suministro provocados por la pandemia y el Brexit.
La salida de la Unión Europea sigue causando problemas al Reino Unido
"Como la mayoría de los minoristas, actualmente estamos experimentando algunos problemas en la cadena de suministro, lo que afecta la disponibilidad de una pequeña cantidad de productos. Las bebidas embotelladas y los batidos no están disponibles temporalmente en los restaurantes de Inglaterra, Escocia y Gales", ha señalado un portavoz de McDonald's, que destacaba que el problema estaba intentando paliarse en los próximos días de manera paulatina. Arla Foods, el principal proveedor de lácteos de Reino Unido, ha confesado que fue la cadena rápida la que pidió el cese de estos productos porque no podía manejarlos en la actual situación.
"Queremos pedir disculpas por los inconvenientes y agradecer a los consumidores su paciencia. Estamos trabajando duro para hacerlos volver al menú cuanto antes", concluía el portavoz. No se trata de un problema único de McDonalds, KFC o Domino's, cadenas que se han visto afectadas en mayor o menor medida por la crisis de suministros derivada del Brexit y agravada por la pandemia de coronavirus. Como explican diversas fuentes británicas, se estima que a principios de agosto había un déficit de 100.000 camioneros en todo el Reino Unido, de los cuales al menos 20.000 son ciudadanos de la Unión Europea que dejaron el país cuando se consolidó el Brexit, según los datos mostrados por una encuesta de la Road Haulage Association (RHA).
Esta escasez de personal también ha afectado a los trabajadores de las principales cadenas de comida rápida o supermercados, que atraviesan dificultades de la misma magnitud, con escasez de productos, retraso logístico o caos en la atención al cliente. El caso más grave parece ser el de la cadena Nando’s, que se vio obligada a cerrar medio centenar de sus restaurantes en Reino Unido por problemas en la entrega de pollo.
