La saga Grand Theft Auto ha vuelto a ser acusada de promover actos violentos, esta vez por un suceso en Dartfor, Kent, Reino Unido, donde un joven marino de 23 años, Ryan Donovan, comentó a su amigos que iba a hacer "una masacre al estilo GTA" poco antes de subirse al submarino británico HMS Astute y abrir fuego.
Donovan, armado con un rifle de asalto SA80, disparó a quemarropa al teniente comandante Ian Molyneux, asesinato por el que ha sido condenado a 25 años de prisión. Lo hizo tras haber consumido elevadas dosis de alcohol la noche antes, aunque los medios no han acusado a las bebidas alcohólicas de promover el crimen.
Al asesinato hay que añadir los intentos de asesinato de dos oficiales de guardia, que pudieron refugiarse de los disparos. Además, en el asalto resultó herido de gravedad Christopher Hodge, otro militar.
El fiscal que llevó el caso, Nigel Lickley, llegó a afirmar en el juicio que "Empezó a hablar del videojuego Grand Theft Auto, en el que llevas a cabo una masacre y sumas puntos por matar", describiendo al condenado como alguien que "estaba en un sueño y lo hizo casi como si fuera un videojuego."
El rotativo británico The Metro ha titulado la noticia, que está en portada, como "Sailor's 'GTA gun spree' on nuke sub", es decir, "Tiroteo a lo GTA de un marinero en un submarino nuclear."