En una semana especialmente agitada en torno al uso de la inteligencia artificial en el desarrollo de videojuegos, con Larian Studios en el centro del debate, el creador japonés Hideo Kojima ha vuelto a reflexionar sobre el papel de la IA, insistiendo en que su avance es imparable y que el debate no debería centrarse en rechazarla, sino en aprender a convivir con ella.
En una declaraciones a Nikkei Xtrend, afirmó que no tiene sentido decir "no deberíamos usar IA" o "la IA es inútil". Según Kojima, cuando los teléfonos inteligentes comenzaron a popularizarse también fueron duramente criticados, pero hoy forman parte inseparable de la vida cotidiana. "Ahora vivimos en un mundo en el que hay muchísima gente que no puede vivir sin su smartphone", explica, señalando que la IA sigue un camino muy similar. En su opinión, la clave no está en rechazar la tecnología, sino en aprender a utilizarla "de una forma que nos haga felices".
Podría usarse para mejorar la inteligencia de los enemigos, y que estos reaccionen de manera dinámica al jugador
Estas ideas encajan con lo que el propio Kojima explicó también en una entrevista con CNN, donde profundizó en cómo concibe el uso de la inteligencia artificial dentro del videojuego. Lejos de verla como una herramienta para generar gráficos o contenidos artísticos, el director se mostró más interesado en su aplicación a nivel técnico y sistémico, especialmente en los sistemas de control y comportamiento. En su opinión, la IA puede ayudar a que los juegos se adapten mejor a cada persona, compensando las diferencias en la forma de jugar y aportando mayor profundidad a la experiencia.
Kojima puso como ejemplo el comportamiento de los enemigos y personajes no jugables, que tradicionalmente siguen patrones muy limitados. Gracias a la IA, estos podrían reaccionar de manera dinámica según la experiencia, las acciones y los hábitos del jugador, acercándose más a comportamientos humanos y haciendo el desarrollo menos predecible y más rico en matices.
Al mismo tiempo, el creador de Metal Gear y Death Stranding reconoce los riesgos de una dependencia excesiva. En la entrevista con Nikkei Xtrend advirtió que la IA también podría "malacostumbrar" a las personas, por lo que considera necesario establecer límites, reducir su implicación en ciertos contextos o incluso plantear períodos de desconexión. Para Kojima, el reto no es frenar la tecnología, sino encontrar un equilibrio que permita aprovecharla sin perder autonomía ni capacidad creativa.
