Reggie Fils-Aimé es un icono dentro de la historia de la industria de los videojuegos más reciente, siendo el presidente de Nintendo of America hasta el 2019, cautivando a los amantes de los videojuegos en general y a los de la Gran N en particular gracias a su carisma demostrado en numerosos eventos y en los Nintendo Direct.
Después de estar un tiempo en silencio tras su salida de Nintendo, ahora Reggie Fils-Aimé está apareciendo en diversos medios para hablar de su nuevo libro, contando anécdotas que vivió en sus tiempos como ejecutivo y posteriormente presidente de la delegación americana de la Gran N, descubriendo, por ejemplo, que no era muy partidario de uno de los juegos que se lanzaron en Game Cube durante su "mandato".
Se trata de Donkey Konga, un spin-off musical de Donkey Kong que se lanzó en diciembre de 2003 (Reggie era directivo de marketing por aquel entonces) y que se vendía con unos bongos especiales y en el que teníamos que seguir el ritmo de canciones icónicas de juegos de Nintendo como el propio Donkey Kong, Mario o Zelda.
"Tengo que decírtelo, como ejecutivo, odiaba Donkey Konga", confiesa Reggie en una entrevista en G4TV. "Luché contra nuestra empresa matriz... pensaba que iba a dañar la marca Donkey Kong.
Personalmente, no lo encontraba muy divertido y lo rechacé con contundencia- ¿Pero sabes qué? Lo lanzamos y el primer juego vendió razonablemente bien pero chico, no era un fan".
La lucha de Reggie con Nintendo
Reggie pasó 16 años de su vida trabajando para Nintendo, una carrera larga que también tuvo dificultades con Reggie mostrándose en contra de algunos proyectos de la Gran N como el lanzamiento de Game Boy Micro en los Estados Unidos, enterándose de la existencia de la consola pocos meses antes de su llegada a las tiendas.