La segunda temporada de El Señor de los Anillos: Los anillos de poder se ha estrenado en Prime Video contándonos una nueva historia ambientada en la Segunda Edad en la Tierra Media. A lo largo y ancho de ocho capítulos, la ficción de Amazon Studios conducida por J.D. Payne y Patrick McKay, que ha conquistado a la crítica, nos traslada a Eregion, Lindon o Pelargir y sus alrededores, pero también nos lleva a la desconocida región de Rhûn, un lugar inhóspito y que J.R.R. Tolkien apenas desarrolló en sus Apéndices y novelas pero, que aún así, tiene gran importancia en el Legendarium por muchos motivos.
El Señor de los Anillos: Los anillos de poder presenta por todo lo alto a Rhûn, un desértico y territorio inhóspito en la Tierra Media lleno de cultos oscuros
J.R.R. Tolkien, maestro de la subcreación y de los detalles, plagó su obra de pequeñas pinceladas y características asombrosas que otorgaban a sus escritos, personajes y parajes de una personalidad profunda, tangible y, a la postre, realista. La nueva temporada de Los anillos de poder parece haber captado esta idea, con sus creadores, como nos relataron en una entrevista en Vandal, apostando por ser más fieles a todos estos elementos de los trabajos el profesor. Teniendo en cuenta que la Tierra Media es gigantesca, y mientras la primera temporada se centró en las enigmáticas Tierras del Sur y Lindon, la segunda temporada se adentra en los enigmáticos territorios orientales. Y eso es una buena noticia.
Os recordamos que, al final de la primera temporada, tres hechiceras emergen como habitantes y emisarias de Rhûn, intentando alinearse con el Istar (Daniel Weyman), creyendo erróneamente que es Sauron. Su enfrentamiento posterior revela el apoyo de estas tierras al Señor Oscuro, lo que desencadena el viaje de la intrépida Nori y el Istar hacia este oscuro territorio en busca de respuestas sobre lo que realmente ocurre allí. Una búsqueda de la identidad que, por el camino, se topa con Tom Bombadil, personaje mítico dentro de los relatos de Tolkien, el cual revela revela cómo un poderoso hechicero, otro Istar, tiene esas tierras bajo su yugo. ¿Es uno de los Magos Azules? Bueno, estos Istar, muy a menudo referidos como Alatar y Pallando, quienes viajaron al lejano Este de la Tierra Media, desaparecieron mucho antes de la Guerra del Anillo y su destino es incierto. Encajaría.
"No los he bautizado en base a los colores, porque no los conozco. Dudo que tuvieran colores distintivos", explicó Tolkien sobre ellos hace mucho tiempo. "Qué éxito tuvieron, no lo sé; pero temo que fracasaron, como Saruman lo hizo, aunque sin duda de maneras diferentes; y sospecho que fueron fundadores o iniciadores de cultos secretos y tradiciones de 'magia' que perduraron más allá de la caída de Sauron", indicaba en la Carta 211. Esos cultos secretos, nos llevan a pensar que este Mago Oscuro es otra cosa. No obstante, junto al Mago Oscuro, sus seguidores conocidos como Gaudrim.
Este nombre es especialmente curioso, ya que proviene del sindarin, el lenguaje creado por J.R.R. Tolkien y nos presenta la palabra "gaud" significa "máquina" y "rim" se traduce como "personas", por lo que "Gaudrim" se interpretaría literalmente como "personas máquina", una posible referencia a sus máscaras de bronce y al uso de herramientas e ingenios particulares. ¿Es una referencia a Saruman, al cual los elfos lo llamaron Curunir, que significa el de hábiles recursos y tenía fascinación por las máquinas e ingenios? Sabemos que este hechicero también pacta con estos hombres enmascarados para eliminar al Extraño, quien, acompañado de las Pelosas, enfrenta dificultades en los desiertos de una región también habitada por hobbits de la rama de los Fuertes. Unos desiertos que, ojo, son inhóspitos y un gran misterio en la obra del Profesor y las adaptaciones televisivas o cinematográficos.
A nivel geográfico, y no por ello menos interesante, Rhûn, es un vasto territorio inhóspito en la Tierra Media, que bien se puede equiparar a las regiones del sur como Mordor, Harad y Khand, ya presentadas en la primera temporada y que sí han tenido contrapartidas en El Señor de los Anillos de Peter Jackson o incluso en otros productos audiovisuales. Pero en el noreste, encontramos a los seguidores leales de Sauron en Rhûn, una región ancestral que vio el surgimiento de los primeros elfos y hombres antes de su emigración a otros lugares. Según los escritos de Tolkien, Rhûn limita al oeste con las Tierras Pardas y el Río Rápido o Anduin, y al este con el Mar Circundante o Ekkaia. Entre sus características ortográficas se encuentran las Montañas Rojas y el Bosque Salvaje, así como Cuiviénen e Hildórien, lugares de origen de los elfos y los hombres, respectivamente.
Pero Rhûn se quedó desolada tras ser inundada por el Mar de Helcar durante la Primera Edad y, posteriormente, tras la caída de las Lámparas de los Valar por Morgoth, la geografía de Arda cambió drásticamente, secando la región y haciéndola muy dura para la vida. En Rhûn, cuyo nombre significa "este" en sindarin, vivieron los Aurigas y los Orientales, descendientes de los Hombres Cetrinos, leales a la oscuridad de Morgoth y Sauron. Fanáticos y entregados, casi lograron la victoria para el mal en la Guerra del Anillo y jamás se retiraron o rindieron, luchando hasta el final y hasta tiempo después de la destrucción del Único. Es curioso destacar proviene Khamûl, uno de los Nazgûl más poderosos al servicio del Señor Oscuro, conocido como el segundo de los Nueve Jinetes, solo detrás del Rey Brujo de Angmar. Su posible conexión con el Istar interpretado por Ciarán Hinds (actor que dio vida a Juego de tronos) añade una capa de intriga a una trama que parece ocultar más de lo que se ve en un principio.
A nivel narrativo, esta trama puede tener mucha chicha en Los anillos de poder de cara al futuro. Os recordamos que Aragorn, Saruman -importante esto- y los dos Magos Azules -que posiblemente, iniciaran cultos alrededor de la magia como explicó Tolkien-, han visitado las tierras orientales, pero Gandalf nunca las exploró. Así, el viaje del Istar hacia Rhûn en Los anillos de poder plantea interrogantes sobre su verdadera identidad, en lo que parece un recurso de guion curioso por parte de Payne y McKay que guardan sorpresas en esta trama y el futuro, que versará sobre los anillos de poder y su influencia tras el asedio de Eregion y la caída de Númenor, así como la proliferación de enemigos y orcos por distintas partes de la geografía de la Tierra Media. Pero junto al mal, también resurge un bien, y esto es una buena señal para trasladar las historias de Tolkien en la pantalla. Veremos cómo queda todo.
El Señor de los Anillos: Los anillos de poder, con nuevos episodios cada jueves, se emite en Prime Video.