Command & Conquer ha vuelto a consagrarse como referencia en el panorama de la estrategia en tiempo real, tras varios años de discretas actuaciones o incluso aciaga inactividad. Recuperando el ritmo de lanzamientos que tenía en su época dorada, de la mano de sus creadores originales de Westwood Studios (actualmente extintos como tal), ahora Command & Conquer garantiza un juego por año y también entregas de expansión para los mismos, que incluso aparecen en consolas de la misma forma que lo hacen en PC. La rentabilidad obtenida por Electronic Arts, actual titular de la franquicia, con Command & Conquer 3 Tiberium Wars y Command & Conquer 3 La Ira de Kane, ha hecho considerar a la corporación norteamericana el no centrarse exclusivamente en el frente de las guerras futuristas del Tiberio (en las que también hará énfasis el nuevo FPS en el contexto de la saga que se encuentra en preparación, conocido como Tiberium), sino también recuperar la otra gran línea argumental valorada por los aficionados de Command & Conquer.
En una cronología alternativa en la que la Segunda Guerra Mundial nunca transcurrió, a consecuencia del prematuro asesinato de Adolf Hitler a manos de un Albert Einstein que había conseguido viajar en el tiempo desde 1946 hasta 1924, el viejo gigante conocido como la Unión Soviética, de la mano de Joseph Stalin, vio su oportunidad de dominar Europa sin que los ahora inexistentes Nazis o cualquier amenaza de similares proporciones se interpusiese en su camino. Así nació Command & Conquer Red Alert, en el curso de unos acontecimientos bélicos a gran escala en Europa en la década de los cincuenta, sustituyendo la Segunda Guerra Mundial, y que enfrentó a las principales potencias europeas, agrupadas como las "Fuerzas Aliadas", con los ejércitos de la Unión Soviética. El conflicto finalizó con el asalto final de los Aliados a Moscú, gracias en gran parte a las habilidades de teletransportación de una de las mayores creaciones de Albert Einstein, la Cronosfera, y produciéndose además la muerte del dictador Stalin durante el transcurrir de dicha batalla.
En los años sucesivos, y como vía de prevenir que la Unión Soviética volviese a iniciar otra ofensiva a gran escala, las Fuerzas Aliadas colocan a Alexander Romanov como Premier soviético bajo su influencia. Aún con ello, Romanov tenía sus propias intenciones y fue conformando en secreto un nuevo ejército bajo la tapadera pacifista de la Alianza Mundial Socialista (formada por países del segundo mundo de causa política no favorable a las potencias del primer mundo), contando además con la inestimable asistencia de Yuri, uno de los especialistas psíquicos más valiosos de Stalin. Con ello, trazó un plan de ataque e invasión sorpresa a los Estados Unidos, tanto por ambas costas como por la frontera con México, y lo llevó a cabo satisfactoriamente gracias a las nuevas facultades de control mental de efectivos desarrolladas por Yuri, comenzando así Command & Conquer Red Alert 2.
Eventualmente las fuerzas estadounidenses, nueva principal potencia de las "Fuerzas Aliadas" en esta entrega, consiguen sobreponerse del golpe, y, con varias victorias clave y la ayuda de las experimentadas potencias europeas, logran recuperar el dominio del país norteamericano e iniciar una ofensiva en Moscú gracias nuevamente a la Cronosfera, derrocándose así a Romanov. El paradero de Yuri, sin embargo, era desconocido, desvelándose posteriormente en Command & Conquer Yuri’s Revenge (expansión de Red Alert 2) que este se había segmentado de las fuerzas de la Unión Soviética y que tenía las suyas propias, fuertemente basadas en las habilidades psíquicas, en preparación para obtener el control mundial mediante el uso de un potente mecanismo de dominación psíquica global, que no puede ser detenido a tiempo de su activación por las Fuerzas Aliadas. Esto les obliga a, con la inestimable ayuda de Albert Einstein, viajar atrás en el tiempo para prevenir su construcción y detener definitivamente a Yuri, estableciéndose incluso una alianza forzada con la Unión Soviética para lograr dicho objetivo.
Command & Conquer Red Alert 3 nos presenta nuevamente a una Unión Soviética resignada a la supervisión de las Fuerzas Aliadas. En esta ocasión, el plan soviético para liberarse de la influencia aliada y optar a la dominación mundial pasa por recurrir a los viajes temporales que tanto éxito dieron a las Fuerzas Aliadas contra Yuri. Así pues, las fuerzas soviéticas trazan un plan consistente en viajar atrás en el tiempo para asesinar a Albert Einstein, uno de los principales efectivos en la causa aliada, que se lleva a cabo satisfactoriamente, esperando así poder cambiar la historia y que le sea más sencillo a la Unión Soviética cumplir con su objetivo ante una probablemente más débil Alianza de naciones. Las consecuencias producidas por este trastoque cronológico, sin embargo, no son las del todo esperadas, pues esta nueva línea temporal no sólo sigue manteniendo a las Fuerzas Aliadas, sino que además provoca una alteración generalizada de la evolución tecnológica originándose una nueva potencia tecnológica y militar en el Este: el Imperio del Sol Naciente.
De este modo, la tercera entrega de Red Alert origina un conflicto bélico a gran escala que no sólo preserva a los clásicos bandos de las Fuerzas Aliadas y la Unión Soviética, sino que a ellos también se une esta nueva facción de raíces claramente niponas. Dado que la saga Red Alert es de un carácter algo más disparatado (especialmente por Red Alert 2) y no tan serio como suelen ser los conflictos del Tiberium, el equipo desarrollador de EA Los Angeles aprovechará la oportunidad para enfatizar aún más si cabe absurdos tópicos de los bandos combatientes en cuanto al diseño de sus tropas se refiere. Todo ello, manteniéndose el rápido y ágil estilo de juego que caracteriza a Command & Conquer, donde construir estructuras y recolectar recursos son trámites que no complican el crear grandes ejércitos en poco tiempo para originar constantes batallas.
Manteniéndose prácticamente intacta la base de Red Alert 2 para los Aliados y los Soviéticos, los primeros verán reforzados su arsenal, en base a su tradición de tecnología espaciotemporal, con "criocópteros" equipados con un potente rayo congelante y el regreso de una actualizada Tanya Adams, heroína aliada de los dos primeros Red Alert caracterizada por sus dos pistolas semiautomáticas capaces de fulminar cualquier tipo de infantería de a pie, que contará además con la asistencia de un cinturón de espacio-tiempo que le permitirá recuperar energía realizando viajes temporales. Las fuerzas de la Unión Soviética, por su parte, incorporarán a sus filas un escuadrón de paracaidismo formado por osos mecanizados que, independientemente del evidente toque humorístico, son ideales para realizar fuertes ofensivas inesperadas, y también los "sickles", vehículos arácnidos anti-infantería que pueden sortear fácilmente los diferentes niveles de altura del mapeado. Igualmente, el característico armamento eléctrico (o tesla) soviético se verá expandido con los "stingrays", unidades navales tesla que también tienen la facultad de desplazarse por tierra.
Así como los Aliados y los Soviéticos no dejan de ser viejos conocidos de los jugadores, la principal innovación de esta entrega residirá en lo que ofrecerá el completamente nuevo escuadrón del Imperio del Sol Naciente. La divertida muestra de tópicos en Red Alert hacen presentar a esta facción como un popurrí de robots, mechas y gundams característicos de la ficción japonesa. De esta forma, las unidades mecanizadas de tierra Mecha Tengu y las navales Seawing, además de sus facultades estándar de ataque, poseen la habilidad secundaria de transformarse en unidades aéreas para una mejor cobertura tanto ofensiva como defensiva.
El sistema de edificación japonés también es diferente, pues prescinde del sistema clásico de construcción en proximidad a otras edificaciones y recurre a unidades anfibio edificadoras que se desplegarán como estructuras donde el jugador lo desee, de una forma similar a como siempre se han establecido los talleres centrales de construcción en Command & Conquer. En cuanto a las unidades de infantería, veremos combatientes nipones como ninjas y soldados anti-tanques equipados con unos magnéticos sombreros labradores chinos que les permite esconderse bajo tierra, así como también un efectivo especial bajo el nombre de Yuriko Omega que, bajo una inocente apariencia de colegiala japonesa, esconde una comando de poderosas habilidades de telequinesis, capaz de disparar ondas psicoquinéticas e incluso hacer levitar vehículos enemigos y destruirlos de ese modo.
Siguiendo la línea habitual marcada tanto por la saga como por el género, los tres bandos contarán con sus respectivas campañas en las que se irán desarrollando el curso de sus actuaciones en el conflicto bélico. La principal novedad de Red Alert 3, sin embargo, es que estas campañas serán asumidas por el jugador de manera cooperativa con otro comandante y su ejército, ya sea con una de las tres inteligencias artificiales disponibles para cada bando, cada una con diferentes estilos de juego y estrategia, o en cambio con otro jugador, potenciando sobremanera el aspecto multijugador de este nuevo Command & Conquer respecto a los anteriores, que asimismo mantiene la clásica modalidades para varios jugadores conocida como Escaramuza. Y mientras en PC jugaremos con el clásico interfaz de Command & Conquer para esta plataforma, en Xbox 360 se continuará utilizando el sistema radial que tan buen resultado ha dado en Command & Conquer 3 La Ira de Kane para esta consola.
No faltará a la cita uno de los factores que mayor identidad propia ha otorgado siempre a la franquicia de Command & Conquer, las secuencias cinematográficas de corte hollywoodense, que Electronic Arts recuperó para la franquicia en Command & Conquer 3 Tiberium Wars y su expansión La Ira de Kane, y que en este caso dejarán de lado el talante serio y oscuro del contexto de las guerras del Tiberio para adoptar un carácter más humorístico y colorista, siempre dentro de los límites de protocolo que un conflicto bélico permite, pero igualmente no dejando indiferente al espectador con excentricidades, acentos forzados y muchos tópicos rusos, japoneses y de las principales potencias occidentales. En un reparto de actores que Electronic Arts aún no ha desvelado al completo, se conoce que la luchadora especialista en Muay Thai, Gina Carano, asumirá el rol de Natasha Volkova, francotiradora que actuará en el juego como comando específico del bando soviético (en contraposición a Tanya para los Aliados y Yuriko para el Imperio) y que también será una de las principales caras de la Unión Soviética en estas secuencias.
Y en un movimiento muy esperado por gran parte de los aficionados a la saga en estos últimos años, Frank Klepacki, antiguo compositor de Westwood Studios (ahora en Petroglyph Games) que elaboró las bandas sonoras de todos los Command & Conquer hasta Command & Conquer Renegade, trabajará en la realización musical de Red Alert 3 mediante acuerdo con Electronic Arts. Con un estilo de composición fuertemente influenciado por los géneros de Industrial Metal, Alternative Rock y Hip Hop, que le sirvió incluso para obtener galardones oficiales con su trabajo en el primer Red Alert, el polifacético compositor, que siempre quiso volver a trabajar en un nuevo Command & Conquer, ha prometido que creará una nueva versión de Hell March para Red Alert 3 (Hell March y Hell March 2 fueron los temas musicales principales de los dos primeros Red Alert respectivamente), así como algunos otros temas característicos de su factura.
Command & Conquer Red Alert 3, con apariciones para PC y Xbox 360 previstas para octubre de 2008 (y una versión para PlayStation 3 que actualmente se encuentra en estado indefinido) en la tradición del "Octubre rojo" que siempre han seguido los Red Alert, volverá con la intención de ofrecer la estrategia en tiempo real más directa y divertida que una "guerra fría moderna" haya podido contemplar.
