Es sorprendente lo longeva y resiliente (palabra de moda estos días) que ha acabado por resultar la saga Ys, seguramente porque el carácter de sus creadores, la empresa Nihon Falcom, es bastante parecido. Y es que aunque hablamos de una empresa que cotiza en el parqué de Tokio, lo cierto es que pertenece a ese grupo de desarrolladoras que avanzaron abriéndose camino desde principios de los 80, siendo capaces de acertar con la dirección de sus pasos en un momento en el que no había nadie por delante señalándoles hacia dónde ir.
Si por algo son conocidos es por ser una de las primeras empresas en hacer juegos de rol, empezando por un juego llamado Panorama Toh en 1983 para la serie de ordenadores PC88.
Pero no es hasta la saga Dragon Slayer que no empiezan a marcar el terreno, a los que habría que añadir los spin off (y que luego se quedaría como la marca) Legend of Heroes, Xanadu y finalmente Ys.
De la saga Ys se ha hablado mucho, destacando el hecho de ser uno de los primeros juegos en hacer un esfuerzo en contar una historia con cierta coherencia e importancia, pero poco por Occidente. Y eso que desde la primera entrega ya estuvimos relativamente bien conectados con ella, porque pronto apareció en Europa y América en una excelente versión para Master System, una segunda entrega para Turbo Grafx CD, y una tercera parte tanto para Mega Drive como para Super Nintendo. Pero por algún motivo que no acabamos de entender, ahí acabó su relación con los territorios que no entendemos japonés, y no fue hasta PlayStation 2 y más de 15 años después que se pudo ver en territorios occidentales una nueva entrega de la saga, siendo ya la sexta en orden cronológico.
Desde entonces, hemos podido disfrutar de Ys con cierta regularidad, y se ha ganado de nuevo el respeto de los aficionados. En esta última edición del Tokyo Game Show hemos podido jugar a una versión de prueba para ver que tal se manejan las nuevas posibilidades.
Probando el nuevo Ys
De nuevo han apostado por ese estilo hack & slash que ya se puede ver desde las últimas entregas, y que tan bien parece haber casado entre el público. Un detalle curioso es que la historia del juego continúa los acontecimientos vistos en Ys Seven, un juego de PSP que originalmente ya tiene unos siete años, pero que se ha podido disfrutar recientemente desde PC (la octava entrega cuenta aventuras que tienen lugar un poco antes de este juego).
Así, acompañamos a Adol Christin, el protagonista de la saga Ys, en la ciudad prisión de Balduq después de haber sido acusado de la desaparición de un militar. Pero Adol no está solo, sino que le acompañan un par de esos "Monstrum" que dice el nombre, esto es, personas con habilidades especiales que a veces los usan para el bien y otras para motivos menos bondadosos. En la demo nos acompañaban Hawk, un chico rubio y un poco más alto que Adol, y Raging Bull, una chica de pelo rosado y muy fuerte.
Y lo cierto es que en esta ocasión han tenido el detalle de pensar en los pobres desplazados a Tokyo que no acaban de controlar el idioma japonés, y aparte de poner los menús en la lengua nipona también estaban en inglés, así que a pesar de la gran cantidad de comandos que podemos ejecutar en este juego, fue algo más sencillo que en otros títulos sin este detalle.
Por no alargar demasiado la cosa, en Ys IX: Monstrum Nox, y salvo que lo cambien de aquí a un futuro (o que la versión japonesa y la europea funcionen distinto, cosa que ya ha pasado anteriormente), nos permite atacar con el botón círculo, saltar con el X, dejar marcados a los enemigos con el triángulo y cambiar de personaje con el cuadrado. Además, con los gatillos podemos usar habilidades, movimientos defensivos y un especial si apretamos los dos a la vez. Incluso podemos dar órdenes a nuestros compañeros con el touchpad de la PS4, lo que os puede dar a la idea de que el control de este juego, si bien es rápido e inmediato, tiene cierto nivel de complejidad.
Una vez nos hemos metido en faena y llegamos a los primeros combates, empezamos a verlo todo en muchos colores, y es que el trío de personajes que tenemos irá peleando con los enemigos que nos encontremos, y esto provoca que haya una gran cantidad de espadazos, flashes y otros golpes en la pantalla. Por suerte, al menos por lo visto allí, todo funciona de una manera muy fluida, pero veremos en qué queda la cosa cuando lo podamos jugar en casa. Lo cierto es que el sistema es muy divertido, y lo podemos considerar un punto intermedio entre Bayonetta (tiene incluso una especie de "mini tiempo brujo") y Diablo por la posición de la cámara y la cantidad de golpes y combinaciones que podemos hacer.
Por si fuera poco, cuenta con una cierta cantidad de plataformeo y exploración, y movimientos que tienen los tres personajes como poder sacar unas alas y planear, o poder escalar las paredes ayudan en esta percepción. Pudimos enfrentarnos a enemigos pequeños y poco a poco más grandes, y también explorar a conciencia el escenario (una especie de mezcla entre cárcel y cueva) de la demo, algo a lo que ayudaba un minimapa que se encuentra en la esquina inferior izquierda de la pantalla y que nos permitió poder encontrar algunos cofres más o menos escondidos.
A mitad demo, y tras una pequeña introducción cinematográfica, nos enfrentamos a una especie de jefe, un enemigo mucho más poderoso y resistente que los vistos anteriormente. Con una música muy marca de la casa (los primeros Ys fueron sonorizados, entre otros, por Yuzo Koshiro, uno de los músicos más relevantes de la historia de los videojuegos), acaba por llevar la fórmula de combate un poco hacia el lado Monster Hunter, donde el enemigo aprieta pero no ahoga. Poco después salimos hacia un escenario que ya era fuera de la cueva, con nuevos enemigos y posibilidades, pero ahí ya se nos acababa el tiempo de la demo, así que no pudimos ver mucho más.
Una saga en plena forma
Este Ys IX: Monstrum Nox tiene mimbres para ser un gran juego, aunque a día de hoy no parece tener una fecha de lanzamiento planeada para Occidente. Su historia parece interesante, y su sistema de combate y exploración es muy divertido, además de funcionar todo de manera muy fluida y relativamente espectacular. Esperamos que en esta ocasión no nos hagan esperar demasiado tiempo para disfrutarlo, ya que tras la octava entrega la saga es posible que sea más popular que nunca en Occidente.
Hemos podido jugar a esta demo en el stand de Konami del Tokyo Game Show 2019.