Durante la presentación de Electronics Arts que tuvo lugar en el hotel Keio Plaza de Shinjuku pudimos ver algo más de material de EA Sports: MMA (Mixed Martial Arts). El videojuego de este deporte que cada día está atrayendo a más seguidores, y con gran éxito particularmente en Japón, intenta recrear de una manera lo más fiel posible el universo de las competiciones oficiales de las artes marciales mixtas.
La presentación corrió de la mano de Dale Jackson, productor ejecutivo del título, el cual para hacerla más atractiva nos trajo a dos representantes de la competición especialmente famosos en el país nipón como Hidehiko Yoshida (retirado el pasado abril) y Tatsuya Kawajiri (con un registro actual, según se nos comentó, de 34 victorias por 6 derrotas). Tras una pequeña demostración y buenas palabras de los luchadores sobre el título que prepara la compañía americana, pudimos probar nosotros mismos lo que ofrecía EA.
En primer lugar cabe indicar que el juego ha tenido bastantes obstáculos durante todo su desarrollo. Primero Dana White de la UFC (Ultimate Fighting Championship) amenazó con expulsar de por vida a cualquier luchador que firmase un contrato con Electronic Arts para participar en su videojuego. Al parecer la compañía americana menospreció el deporte durante algunos acercamientos pasados según las palabras de White. Más tarde, desde THQ también le llegaron las críticas por parte de Neven Dravinski, director de proyecto de UFC Undisputed 2010, cuando mencionó que la única competencia para su título era la anterior entrega UFC 2009. Para terminar, las leyes danesas y su estricto control sobre la publicidad de bebidas energéticas finalmente han conseguido parar el videojuego en las fronteras escandinavas; no se publicará en Dinamarca.
Ya con las manos en el mando pudimos ver un amplio número de personajes a elegir, cada uno con sus estadísticas como fuerza, velocidad o sumisión. Según nos confirmó el propio Jackson, serán un total de 60 luchadores con su correspondiente arte marcial, como el Muay Thai, Kickboxing, Jiu Jitsu, etc...
Una vez elegido el personaje, pudimos ver algunas localizaciones de los combates, todas con un perfecto realismo y gran similitud con los verdaderos ring que se utilizan en las peleas de las artes marciales mixtas. El trabajo grafico en cuanto a diseño de los personajes es excelente. El parecido con los luchadores reales está muy conseguido y, durante la pelea, hasta el sudor proporciona unos reflejos con los focos de lo más realista. Las animaciones también están muy trabajadas y se corresponden fielmente al modo de lucha que se realiza en las competiciones.
Sin embargo, la jugabilidad no deja tan buen sabor de boca, al menos durante los primeros intentos. El sistema viene heredado de Fight Night, donde con el stick izquierdo nos moveremos por el ring mientras que con el derecho efectuaremos los ataques. Pulsando los gatillos y moviendo el analógico derecho además cambiaremos a patadas o a bloqueo dependiendo del gatillo. Con el movimiento que realicemos con el stick derecho nos realiza un tipo de puñetazo o patada distinto, sin embargo en muchas ocasiones el resultado no es el previsto o incluso no llega a lanzar el golpe. El hecho es que necesitaremos de una buena cantidad de tiempo para hacernos con un control perfecto del mando.
Por otra parte y como es natural en dicha competición, los luchadores pelearán tanto de pie con intercambios de golpes, como tirados en la lona con espectaculares movimientos de llaves o, si no tienes mucha piedad, con más y más golpes. Existen dos movimientos de sumisión, por una parte están las llaves de asfixia que nos harán conseguir la victoria cuando el contrincante prácticamente pierda el sentido, o bien las llaves que podríamos denominar óseas, que consisten en conseguir fracturar un hueso del oponente convirtiéndote automáticamente en ganador del combate.
Ambas llaves se deben efectuar en el suelo así que pulsamos el botón que llevará al enemigo con su espalda a la lona. A través de pulsar una serie de secuencias de botones conseguiremos realizar una llave a nuestro contrincante, sin embargo el proceso es algo rígido y poco realista. Cuando lanzamos el enemigo contra el suelo y después vamos a inmovilizar su brazo para luego inmovilizar su pierna, en cada uno de esos pasos de las maniobras la animación se detiene para realizar la siguiente, al mismo tiempo podemos ver al oponente como si fuera un muñeco de trapo que no parezca tener mucha intención de zafarse. Esta característica recorta cierta intensidad al título ya que en ocasiones parece un poco más un tema de turnos estratégicos que de una pelea de verdad. Es cierto que han intentado recrear ciertos movimientos en las maniobras de inmovilización como los que se efectúan en la realidad, sin embargo la fluidez de animaciones entre los diferentes pasos no está muy conseguida.
Pero donde recae la máxima originalidad del título es en el modo online. Además de la clásica y normal pelea 1 vs 1 en la que podrás competir con tu amigos o desconocidos en la red, EA quiere añadir aún más carne al asador con un evento especial: Live Broadcast. La compañía americana quiere fomentar el título tal y como se ha fomentado el deporte, mediante el público. Si no hay gente que desee ver un espectáculo, no hay espectáculo, y esto es lo que se ha propuesto Electronic Arts con el Live Broadcast.
Según indicaron, una vez cada 15 días se realizarían dos combates 1 vs 1 entre jugadores de MMA. A su vez estos combates podrían ser visionados por toda la comunidad de MMA que asistirían como espectadores. Dichos combates serían promocionados con vídeos de los contrincantes en el previo, retándose como si de púgiles se tratase. Los jugadores que quieran participar podrán subir sus vídeos desafiando a otros jugadores, aunque sólo los más hábiles podrán participar en este tipo de eventos, ya que serán personajes reconocidos por la comunidad y atraerán a más público.
El espectáculo está servido, las competiciones brutales de las artes marciales mixtas conseguirán, si eres realmente hábil, convertirte en un referente en la comunidad MMA.
