Children of the Sun es la nueva sorpresita de Devolver Digital. La editora lo anunció hace unos días con un tráiler que además de revelar su existencia también servía para dirigirnos hacia su recién estrenada demo gratuita. La premisa de este juego desarrollado por el berlinés René Rother ya es atractiva por sí misma (una aventura de venganza en la que controlamos a la bala, más que a quien la dispara), pero su gameplay es todavía mejor y más estimulante.
Una bala basta
Lo fundamental de Children of the Sun es eso, que controlas la bala que disparas y sólo tienes una por nivel.
El objetivo es acabar con todos los enemigos de cada escenario, así que aquí el juego se vuelve mágico y desvela que podemos rebotar en cada enemigo: al hacer diana en un cuerpo podemos disparar desde ahí al siguiente objetivo, convirtiéndose en un shooter estratégico con bastantes más capas de profundidad de las que puede parecer.
En un principio los niveles de Children of the Sun presentan un diseño básico: hay dos o tres enemigos y tenemos que hacer rebotar la bala en todos ellos para superar la misión. Después la cosa se va torciendo: no sólo aparecen más enemigos, sino que lo hacen en posiciones determinadas para que tengamos que encontrar el mejor disparo inicial posible antes de encadenar todas las bajas.
Movimiento lateral en escenarios circulares
Antes de disparar, eso sí, hay que encontrar el punto ideal para hacerlo. Es ahí donde movemos al personaje, una chica en busca de venganza, que sólo se puede mover de izquierda a derecha. Muchos escenarios son circulares, por lo que los rodearemos para dar con el mejor sitio desde el que apretar el gatillo, pero otros nos dejan menos espacio para movernos y tendremos que apañárnoslas con lo que tengamos. Este movimiento, por cierto, se ejecuta con una sola mano moviendo el ratón a un lado o hacia otro.
Para darle más profundidad, el juego va introduciendo cositas que hacen que su mecánica principal sea cada vez más satisfactoria. En un punto, por ejemplo, te enseñan que los depósitos de los coches estallan y sirven no sólo para acabar con varios enemigos a la vez, sino también como punto de rebote. Más adelante te enseñan a redirigir la bala en plena trayectoria e incluso a que encadenar disparos en zonas críticas te permite recargar una vez el proyectil.
Jugabilidad adictiva de la que es difícil cansarse
Todo esto demuestra que Children of the Sun tiene un catálogo de ases bajo la manga para aprovechar al máximo su mecánica principal, y no sólo con dichos alicientes jugables sino también con el propio diseño de los escenarios, muy bien construidos para ser desafiantes al mismo tiempo que ofrecen libertad para resolver cada puzle (porque eso es en realidad este juego, un rompecabezas que tenemos que resolver disparo a disparo). Introduciendo obstáculos, trayectorias imposibles y objetivos en movimiento refresca constantemente sus desafios y pone sobre la mesa nuevas ideas.
Vaya burrada de juego es Children of the Sun. Parece mentira que todo esto se juegue con una sola mano pic.twitter.com/rOUzAe0WMt
— Manu 🌿 (@ManuDOMB) February 3, 2024
Ya en la demo este proyecto se descubre como uno muy adictivo y rejugable: los puzles no sólo hay que resolverlos, sino que también se obtienen puntos dependiendo de nuestras acciones (si tardamos más o menos, si logramos disparos desde mayor distancia, si hemos repetido porque la bala ha chocado con un obstáculo…). Hay una tabla de puntuación que anima a reintentar niveles ya superados para hacerlos mejor, más bonito y conseguir más puntuación.
Y por si fuera poco, Children of the Sun no sólo es muy gratificante a los mandos (aunque se juegue con una mano) sino que además tiene un apartado audiovisual excelente. Sus gráficos apuestan por un poligonaje sencillo, de bordes cortantes y figuras casi esbozadas, y su paleta de color grisácea logra tanto una atmósfera cruda (como la trama del juego, en la que nos enfrentamos a una secta por motivos muy personales) como un diseño de niveles asfixiante y exigente. La música, los efectos sonoros y las cinemáticas estilo cómic redondean un conjunto muy estimulante.
Conclusiones
Tras jugar la demo de Children of the Sun sólo podemos decir que estamos deseando de que llegue el juego completo, aunque de momento su fecha de lanzamiento está por determinar. Es un proyecto original y estimulante, con una jugabilidad satisfactoria que se renueva constantemente para desafiarnos y dejarnos con ganas de más. Su diseño de niveles saca provecho de ella, ofreciendo retos exigentes sin coartar nuestra libertad para cumplirlos (aunque sí recompensa las buenas jugadas). Además de todo esto, apunta a que su historia va a ser como mínimo interesante, y también sacará partido de su crudo apartado audiovisual.
Hemos realizado estas impresiones probando el juego en PC con su demo gratuita disponible en Steam.