Uno de los anuncios esperados de la Gamescom era el de la primera expansión de Age of Conan, el juego de rol masivo online de la noruega Funcom, que tras un exitoso lanzamiento en mayo de 2008 ha ido titubeando, creciendo y decreciendo, cambiando de rumbo para intentar mantener a sus usuarios e incrementarlos en un futuro. Aparte de las actualizaciones gratuitas que salen regularmente para el juego, la compañía prepara esta primera expansión, titulada "Rise of the Godslayer". Con un lanzamiento todavía sin fecha, pero próximo, esta primera expansión de juego llevará a los habitantes de Hyboria al remoto oriente, al Imperio de Katai, ambientado en la Antigua China, con la que no solo comparte el nombre europeo (Catai) sino también otras similitudes.
Del mismo modo que Cymmeria, Aquilonia y Scythia, los reinos de Hyboria, están inspirados en Europa del Norte, el Imperio Romano y Egipto, Katai está basada en la Antigua China, e incluso cuenta con una muralla para protegerse de los bárbaros. Según nos contaron los desarrolladores, evidentemente esta nueva zona está inspirada en China, pero también en otros lugares del extremo oriente como Corea (concretamente, la antigua Corea).
No se han introducido elementos de la cultura japonesa al considerar el equipo que está sobreexplotada en los videojuegos, y viendo el mundo de Katai en movimiento está claro que tiene muy poco que ver con el resto de Age of Conan, es una mezcla entre lo exótico y lo extraño, y sin duda le da al juego un toque diferente.
La Gran Muralla China, o de Katai, parte este nuevo mundo del juego en dos: una zona intramuros, el Imperio en sí, diseñada para los jugadores desde nivel 20 hasta nivel 40, y una zona externa, llena a rebosar de bárbaros, diseñada para los jugadores de mayor nivel. Una de las características más llamativas de esta expansión es que no se ampliará el límite de niveles; los usuarios de esta expansión no contarán con mayor capacidad de evolución hacia arriba, sino, como nos dijeron los responsables del juego, "hacia los lados". Sin ser realmente más poderosos que los personajes que se hayan quedado en Hyboria, en este nuevo mundo de Katai podremos aprender nuevas habilidades con un marcado toque oriental. En el vídeo pudimos ver cómo los personajes blandían armas como katanas o espadas flexibles, y cómo realizaban técnicas de artes marciales, habilidades que sin lugar a dudas resultarán muy llamativas cuando las use un guerrero con aspecto de vikingo.
El título del juego, "Rise of the Godslayer" (algo así como "la hora del matadioses"), hace referencia al propio Conan. Nuestro bárbaro preferido, 25 años atrás, estuvo por el Imperio de Katai, y se enfrentó al Dios protector, una especie de elefante gigante, al que -al más puro estilo Conan- mató de la forma más violenta posible. La muerte del Dios protector ha provocado que el caos se cierna sobre el Imperio Katai, más amenazado que nunca, y en un principio los habitantes del Imperio no sentirán ninguna simpatía por nosotros -súbditos de Conan-. De hecho, en el juego utilizan un muñeco de Conan como espantapájaros, y en el vídeo que nos mostraron pudimos ver cómo le prendían fuego a los muñecos, en plan ritual de purificación. Mala imagen de marca para Conan.
Otro de los detalles que nos contaron es el sistema de facciones. Como ya se ha hecho en las últimas actualizaciones del juego, Funcom quiere dotar a la experiencia de Age of Conan de cierta historia, cierta toma de decisiones por parte de cada jugador, y en Katai podremos ayudar a las diferentes facciones que luchan por su trocito de poder. Cada facción se identifica con un color y un estilo en su armadura, y dentro de ellas podremos saber quién es más o menos importante por el nivel de armadura que tengan. Realizar misiones para una facción o confraternizar con ella implica, irremisiblemente, enemistarse con las demás, y de hecho a medida que hagamos misiones para una facción, iremos recibiendo sus vestimentas y armaduras. Aparte de facciones dentro de Katai, las tribus bárbaras "al otro lado del muro" también están organizadas, y existen facciones entre ellas con las que podremos relacionarnos.
La otra noveda que nos enseñaron es la de las monturas. Habrá varias nuevas, pero la única que vimos era un tigre de gran tamaño. Según parece, para conseguir montar a lomos de un tigre habrá que seguir un proceso bastante complicado: habrá que unirse a una especie de "culto al tigre" que hay en Katai, luego participar en un ritual de caza del tigre, para luego educar y entrenar a ese mismo tigre y finalmente domarlo para que se convierta en nuestra montura. De ese modo Funcom quiere que los jugadores valoren a su montura y se identifiquen con ella.
Sin fecha de lanzamiento confirmada por el momento, este Rise of the Godslayer tiene bastante buena pinta. Su exótica ambientación oriental y el sistema de facciones resultan bastante originales, y habrá que ver qué novedades "con sabor chino" preparan para el sistema de habilidades. No nos confirmaron una fecha de lanzamiento, pero sí que esta expansión no será obligatoria para seguir progresando, y que el ritmo de actualizaciones del juego original no se verá afectado.