2022 está siendo un año fantástico para los fans de las Tortugas Ninja, especialmente para aquellos que crecimos con la icónica serie animada de los 80. No en vano, en los próximos meses vamos a recibir un suculento y extenso recopilatorio con los juegos que Konami desarrolló para las plataformas de 8 y 16 bits, un sueño que por fin nos permitirá disfrutar en nuestras consolas y ordenadores actuales de todos unos clasicazos que nunca se habían relanzado y que, admitámoslo, echábamos muchísimo de menos.
Por suerte, la cosa no termina aquí y este mismo verano se estrenará Teenage Mutant Ninja Turtles: Shredder’s Revenge, una aventura completamente nueva que devolverá a nuestros quelonios favoritos al género en el que más triunfaron: los beat ‘em up. En Vandal ya hemos tenido la oportunidad de probar sus dos primeros niveles y si hay algo que os podemos confirmar tras haberlos jugado con todos sus personajes jugables es que apunta a ser un juegazo imprescindible tanto para los fans de la licencia como del género.
Gameplay comentado
A continuación podéis ver nuestro gameplay comentado de la versión de PC que hemos podido probar, en el que os contamos qué nos ha parecido y podéis ver cómo luce su precioso pixel art:
¡Cowabunga!
Así pues, estamos ante un "yo contra el barrio" muy tradicional que no oculta en ningún momento su inspiración en obras tan queridas como Turtles in Time o Teenage Mutant Ninja Turtles Arcade, aunque también cuenta con sus propias señas de identidad y no duda en actualizar la fórmula para ofrecernos un juego más dinámico, frenético y satisfactorio a los mandos.
La premisa argumental no podría ser más simple: el Clan del Pie vuelve a hacer de las suyas sembrando el caos por Nueva York, algo que, evidentemente, nuestros héroes no pueden permitir, dándonos así la excusa perfecta para lanzarnos a combatir, ya sea en solitario o en compañía de hasta tres amigos más, a lo largo de varias fases de desarrollo lineal donde no pararán de asediarnos multitud de enemigos en su intento por detener nuestro avance.
La primera novedad nos la encontramos en la misma pantalla de selección de personajes, ya que esta vez el plantel no se limitará únicamente a Donatello, Leonardo, Michelangelo y Raphael para darnos así también la oportunidad de encarnar a April y Splinter, algo que nos hace soñar con que pueda haber más héroes (o villanos) que todavía no hayan sido anunciados.
Como podréis intuir, cada uno goza de unas características concretas de alcance, velocidad y fuerza, y sus animaciones son completamente diferentes, algo a lo que deberemos acostumbrarnos para luchar de manera eficiente. Si bien no son diferencias tan exageradas como las que puede haber entre los personajes de Streets of Rage 4 (por citar un ejemplo reciente), sí que resultan más que suficientes para hacer que la experiencia varíe sensiblemente dependiendo de a quién controlemos, ya que cada uno reparte golpes de manera distinta y tienen pequeños detalles únicos, como la posibilidad de Mikey de rebotar en las cabezas de los enemigos o la manera tan particular en la que Splinter regresa a tierra tras un ataque ascendente.
Eso sí, los controles son prácticamente los mismos para todos ellos, con un botón para pegar guantazos, otro para saltar, uno más para esquivar y un cuarto para ejecutar nuestras técnicas especiales cuando rellenemos el medidor correspondiente.
Partiendo de esta base podremos realizar ataques cargados, agarrar enemigos y lanzarlos en la dirección que queramos (incluso hacia la cámara para mandarlos fuera del escenario), contraatacar tras una esquiva, correr y embestir, golpear en el aire y poner en práctica una maniobra ofensiva ascendente. Además, nuestros especiales varían dependiendo de si estamos en tierra, en el aire o evadiendo y casi todas las acciones que os hemos comentado son fácilmente enlazables unas con otras.
Como veis, una jugabilidad sencilla, clásica y muy intuitiva que con detalles tan simples como la introducción de un botón para esquivar consigue que la acción sea extremadamente fluida y gratificante. De hecho, es aquí donde encontramos una de sus principales fortalezas, ya que los controles responden de maravilla y los personajes se mueven, por norma general, con muchísima agilidad, favoreciendo un ritmo completamente frenético en el que no tendremos ni un solo segundo de descanso mientras encadenamos todo tipo de golpes, evitamos trampas, aprovechamos los elementos del escenario en nuestro favor (por ejemplo, rompiendo una cámara de televisión para usarla como arma arrojadiza) y hacemos frente a decenas y decenas de rivales.
Lo mejor es que el propio diseño de niveles está muy estudiado para que siempre haya sorpresas a cada paso que damos, algo que ayuda a aportar mucha variedad a su desarrollo, con ninjas que salen desde los sitios más inesperados, coches intentando atropellarnos, focos que caen sobre nosotros y jefes esperando a zurrarnos al final de cada pantalla. Además, hay numerosos tipos de enemigos distintos, por lo que deberemos acostumbrarnos a sus patrones para saber a quiénes priorizar y cuándo conviene esquivar. Eso sí, aquí cabe destacar que no duran demasiado y apenas nos harán falta unos pocos golpes para acabar con casi todos ellos, algo que el título intenta compensar llenando la pantalla de rivales, lo que a su vez incrementa ese frenetismo que os comentamos anteriormente.
Un grandísimo homenaje a la serie de animación de los 80
En lo que respecta a su apartado gráfico, tenemos que admitir que nos hemos quedado muy gratamente impresionados con el espectáculo pixel art que pone en pantalla. No solo estamos hablando de unos sprites bien grandes y cuidados para los personajes o de unos escenarios repletos de detalles y vida propia, sino también de unas animaciones brillantes y fluidas que captan a la perfección el alocado espíritu de la serie de animación de los 80, muchas de las cuales reproducen fielmente las poses y movimientos más míticos de cada uno de sus protagonistas.
Basta con ver a cada héroe en movimiento para darse cuenta de todo el mimo que hay detrás de ellos para que su forma de moverse y golpear se corresponda con sus personalidades, aunque esto no acaba aquí y durante las fases no pararemos de ver todo tipo de cosas, como ninjas cocinando, Bebop trajeado dando las noticias en el Canal 6, enemigos robando las ruedas de un coche y hasta a varios miembros del Clan del Pie trabajando duramente con sus ordenadores mientras nos zurramos con sus compañeros.
Una auténtica delicia visual que nos ha transportado de lleno a aquellas tardes frente al televisor viendo las aventuras y desventuras de estos carismáticos hermanos. Y para rematar, una banda sonora muy animada y pegadiza que se adapta como un guante a todo lo que vemos en pantalla, buenos efectos y un doblaje en inglés que cuenta con los mismos actores de la serie original.
Conclusiones
Todavía nos quedan muchas cosas por descubrir de este esperadísimo juego, pero este primer contacto con él no podría habernos dejado más satisfechos. Un beat ‘em up de la vieja escuela muy ágil, frenético y divertido que se controla de fábula, que hace gala de unos gráficos preciosos y que cuenta con una jugabilidad muy depurada que se adapta de maravilla a los tiempos actuales. Si lo que hemos jugado es mínimamente representativo de lo que nos espera en el resto de la aventura, tendremos motivos más que de sobra para celebrar el que apunta a ser el regreso triunfal de las Tortugas Ninja a los videojuegos.
Hemos realizado estas impresiones gracias a una demo para Steam que nos ha facilitado Cosmocover.