La pasada D23, el macroevento en el que Disney, Lucasfilm y Marvel anunciaron sus principales novedades, trajo algunas sorpresas y detalles únicos. Entre ellos la revelación de la primera Presentación Especial de Marvel Studios, Werewolf by Night, un mediometraje o filme para televisión -en este caso, Disney+-, que ahonda en un género inédito o poco explorado dentro del Universo Cinematográfico de Marvel y que, alejado de las habituales historias de superhéroes, intenta apostar frescura y variedad dentro de esta cada vez más atribulada narrativa compartida contándonos más del mítico Hombre Lobo de la Casa de las Ideas. La producción, dirigida por Michael Giacchino (sí, el célebre compositor musical), llega el 7 de octubre al portal de streaming. En Vandal hemos podido verla en adelanto y os contamos qué nos ha parecido en nuestra crítica sin spoilers.
Un proyecto atípico dentro de Marvel y que intenta ser distinto y original
Werewolf by Night nos cuenta una historia particular y distinta, que parece extraída de los tebeos escritos por Doug Moench y con Don Perlin, ahondando en el lado más esotérico y misterioso de la Marvel más paranormal. En esta ficción, etalonada en un sobrio blanco y negro, nos llevará a una noche oscura y sombría, en la que un grupo de secreto de cazadores de monstruos emerge de las tinieblas para reunirse en un templo perdido y aislado, propiedad de la familia Bloodstone, que ha perdido a su líder. Para celebrar su memoria, los asistentes se verán envueltos en una especie de competición mortal en busca de una extraña reliquia, siendo convidados a una cacería que los enfrentará a un poderoso y peligroso monstruo atrapado en un laberinto.
La maldición del Hombre Lobo -título en España-, inspirada en las películas de terror de los años 1930 y 1940, ha nacido con la intención de evocar una suerte de sensación de pavor y lo macabro, arraigada en el lenguaje cinematográfico propio de los exploitation surgidos a raíz del éxito de los monstruos de la Hammer, haciendo énfasis en el suspense, todo ello articulando los habituales sustos de este tipo de cintas. Kevin Feige, mandamás de Marvel Studios, ya nos confirmó que se trataba de una apuesta arriesgada, del lanzamiento y la consolidación de un nuevo rincón del Universo Cinematográfico de Marvel, algo que parece casi exclusivamente dedicado a los experimentos de Disney+, con algunas series fuera del patrón de la fórmula del MCU como She-Hulk, Caballero Luna o la reciente recopilación de cortos protagonizada por Groot.
Protagonizada por Gael García Bernal como Jacob Russof y Laura Donnelly como Elsa Bloodstone, La maldición del Hombre Lobo esconde muchos de los retales de la faceta más paranormal de la editorial de cómics durante los sesenta y setenta, algo que salta a la vista desde su misma introducción, y que queda patente en el simple y efectista guion de Heather Quinn y Peter Cameron, responsables de varios episodios de Ojo de Halcón y Bruja Escarlata y Visión. No esperéis un especial terrorífico, ya que su dosis de sangre y gore es bastante light, pero sí es curioso que en Marvel se hayan permitido adentrarse en lo que parece una copia descarada de las cintas de la Hammer, aquellas en las que los monstruos campaban a sus anchas por bosques y mansiones en blanco y negro.
La pasión en la dirección de Giacchino es envidiable. El compositor de Rogue One: Una historia de Star Wars o The Batman, así como de algunas de las cintas más recientes de Pixar, se permite el lujo de adentrarse en uno de los sueños del músico, el de dirigir una película, dejando claro que sabe lo que hace y rindiendo pleitesía a los grandes del género. Giacchino sabe dónde poner la cámara -desde que era un crío ha estado rodando con su cámara de 8 mm-, qué resaltar a través de la imagen y en qué poner énfasis a través de la banda sonora, también responsabilidad suya. Sí, intenta ser una película de otro tiempo con medios actuales y tics contemporáneos, y no pasa nada absolutamente nada, pero sí es cierto que las carencias del proyecto van resaltándose más y más conforme pasan los minutos -y eso que el filme dura apenas una hora-.
El tramo final y la resolución de La maldición del Hombre Lobo se nos antoja pobre y repetitivo, y pese a que durante varias partes de la cinta encontramos cameos y guiños a uno de los personajes más místicos y queridos de todo el universo de Marvel que logran aderezar esa evidente falta de gracia en la conclusión, la revelación final -previsible- nos resulta un tanto precipitada y, sobre todo, sosa. Sí, Gael García Bernal aprovecha su vis cómica, y eso se le da de maravilla, y su química con Laura Donnelly, la temible cazadora que acompaña al bueno de Russoff, cimenta buena parte de un proyecto que parece un tanto hueco. Sin embargo, y pese a las buenas intenciones de esta apuesta marvelita, hay algo que no encaja y que nos vuelve a arrojar la sombra de la duda sobre si este producto, al igual que ocurría con Yo Soy Groot, habría sido pasto de los extras de un DVD o un Blu-ray en otro tiempo.
¿Es entretenida? Sí, sin lugar a dudas. ¿Es un soplo de aire fresco en un Universo Cinematográfico de Marvel cada vez más caótico y con el piloto automático? Sí. Pero La maldición del Hombre Lobo podría haber sido algo más. Ni su metáfora sobre los monstruos, ni su historia sobre la importancia de saber quiénes somos, están bien tiradas. Su metraje es escaso, algo lógico si tenemos en cuenta que es un especial pensado para potenciar la programación de Halloween en Disney+, pero tiene evidentes fallos en su conclusión. Quizás, como parte de una antología propia de Más allá del límite o En los límites de la realidad, la sensación habría sido otra. En cualquier caso, gustará a los fanáticos y a los completistas. Curiosa, pero no para aullar a la luz de la luna.
Hemos visto La maldición del Hombre Lobo gracias un acceso anticipado a través de Debut proporcionado por la agencia Way To Blue y Disney España
