Amazon ya comercializa oficialmente el Echo Show 11 de última generación como la evolución definitiva de las pantallas inteligentes para el hogar. Este dispositivo combina una pantalla táctil Full HD de 11 pulgadas con resolución de 1920 × 1080 píxeles y brillo de 550 nits, suficiente para mantener la visibilidad incluso con la luz solar directa entrando por la ventana.
El corazón del sistema reside en el chip AZ3 Pro, un procesador diseñado específicamente para ejecutar modelos de inteligencia artificial directamente en el dispositivo sin necesidad de enviar información a servidores externos. Esto significa que las respuestas de Alexa son más rápidas y que toda la información permanece en tu red doméstica, algo que los representantes de Amazon destacan como "una prioridad basada en el feedback directo de nuestros clientes".
La pantalla utiliza tecnología “in-cell” que reduce capas innecesarias, mejora los ángulos de visión por encima de 170 grados y permite que el sonido llegue sin obstáculos. Hablando del audio, el sistema integra altavoces estéreo frontales más un woofer personalizado que proyectan unos graves profundos sin distorsión, incluso a volúmenes altos.
Para videollamadas, monta una cámara de 13 megapíxeles situada en el centro del bisel con función de autoframing, que es una tecnología que mantiene automáticamente a las personas en el plano, aunque se muevan por la habitación. Algo así como tener un operador de cámara invisible al estilo de las películas de Christopher Nolan, pero para tus llamadas con la familia.
Compatible con Zigbee y Thread para controlar la casa sin más historias
La gran ventaja frente a otros competidores es la integración nativa de Zigbee y Thread, que son protocolos de comunicación modernos para que se entiendan los dispositivos inteligentes en domótica. Esto te evitará comprar hubs adicionales para conectar bombillas, cerraduras, termostatos o cámaras de seguridad.
Amazon incluye también una tapa física para la cámara y botón de mute con un indicador discreto, permitiendo desactivar manualmente los sistemas de captura -audio y vídeo- cuando sea necesario. Aparte, puede utilizarse como un marco de fotos digital cuando está en reposo, mostrando álbumes personales en alta definición.
La base ajustable, que se vende por separado por 39,99 euros adicionales, permite modificar el ángulo y la altura del dispositivo para adaptarlo a diferentes espacios como la cocina o el escritorio.














