La plataforma Netflix ha tirado los dados y le ha salido una jugada grande: la plataforma ha adquirido los derechos globales de Catan en un acuerdo con Asmodee para abrir un “universo” audiovisual que abarcará película, serie y formatos sin guion, tanto en acción real como en animación.
El anuncio llegó con un mensaje tan guiñado al fan como inequívoco—“Hold on to your sheep”—y confirma que la traslación del célebre tablero a la pantalla no será un proyecto aislado, sino una franquicia en toda regla.
La jugada de Netflix llega tras años de tanteos con otras adaptaciones lúdicas y en plena fiebre por IPs reconocibles. Según los primeros avances publicados por la prensa de entretenimiento, el plan contempla múltiples proyectos en paralelo y con la implicación de Catan Studio y de la familia de Klaus Teuber, creador del juego, lo que sugiere que se preservará la identidad del mundo de islas, rutas y trueques que ha hecho de Catan un fenómeno intergeneracional.
Una IP con millones de ventas
El movimiento no es menor si se atiende al tamaño de la marca: desde su publicación en 1995, Catan (antes Los colonos de Catan) ha vendido decenas de millones de copias y se ha traducido a más de 40 idiomas; su mezcla de azar controlado, negociación y gestión de recursos convirtió a la oveja, el grano, la arcilla, la madera y el mineral en moneda cultural pop mucho más allá de las mesas de juego. Esa visibilidad, y la facilidad para articular conflictos dramáticos en torno a alianzas y traiciones, explican por qué Netflix ve aquí material para expandirse en varios frentes narrativos.
Quedan por resolver, eso sí, las preguntas clave: ¿cómo se adapta un eurogame sin personajes canónicos a un relato audiovisual? Las primeras informaciones hablan de un “amplio abanico” de piezas—ficción seriada, largometraje y contenidos unscripted—que permitirían abordar desde epopeyas de colonización y comercio hasta competiciones o docuseries que exploren la cultura del juego de mesa. Pero ni reparto, ni showrunners, ni calendario han sido aún comunicados; Netflix y Asmodee se han limitado por ahora a oficializar el acuerdo marco y a marcar el tono.
El juego que conquistó mesas en todo el mundo y rompió amistades está de camino. Bienvenidos a CATÁN, muy pronto en Netflix 🔥 pic.twitter.com/52uNuLEkmG
— Netflix España (@NetflixES) October 22, 2025
La reacción del ecosistema gamer ha sido inmediata: de la celebración a la ironía, con quinielas sobre si el enfoque derivará hacia la intriga política a lo Juego de Tronos—trueques, bloqueos de puertos, asaltos del ladrón—o si se optará por una aventura más clásica, al estilo fantasy de colonos y caravanas. Al margen del meme, la operación ilustra la siguiente pantalla de la “guerra de IPs”: tras los videojuegos, los grandes catálogos de juegos de mesa se consolidan como cantera para streamers y estudios en busca de propiedades con base de fans global y lore expandible.















