Un supuesto platillo volante ha desatado todo tipo de conjeturas tras aparecer en Google Maps, en una zona desértica del centro de Argelia. Las coordenadas (28°8'45.15"N, 6°48'20.85"E), situadas cerca de la ciudad de Bordj Omar Driss, muestran lo que a simple vista parece un objeto metálico de forma circular parcialmente enterrado en la arena.
La imagen se ha hecho viral en redes sociales, donde algunos usuarios insisten en que se trata de una nave extraterrestre que habría permanecido oculta durante milenios.
Un cazador de ovnis fue el primero en hablar del hallazgo
El primero en lanzar la teoría fue el conocido “cazador de ovnis” Scott Waring, quien declaró al Daily Mail que “es probable que el OVNI haya estado allí durante decenas de miles de años, antes de la historia humana registrada”. Sus palabras han avivado la imaginación de aficionados a lo paranormal y conspiracionistas digitales que siguen cada nuevo hallazgo en Google Earth como si fuera una pieza clave del puzle extraterrestre.
Sin embargo, la explicación podría ser mucho más terrenal. Nick Pope, exinvestigador de fenómenos aéreos no identificados en el Ministerio de Defensa británico, se mostró escéptico: “Con la expansión de la inteligencia artificial, cada vez es más difícil saber si una imagen ha sido manipulada. Pero incluso asumiendo que sea auténtica, lo más probable es que estemos viendo una estructura humana”. Según Pope, aplicar la navaja de Occam —el principio según el cual la explicación más sencilla suele ser la correcta— sugiere que no estamos ante un platillo, sino ante una simple base circular.
En efecto, según información recopilada por Daily Mail, lo que se observa en la imagen es probablemente la cimentación de una turbina eólica terrestre. Estas bases suelen ser enormes plataformas de hormigón armado, enterradas a varios metros bajo tierra, sobre las que posteriormente se instala la torre del aerogenerador. La forma circular, el color grisáceo y la aparente profundidad bajo el nivel del suelo encajan con esta explicación técnica.
Aun así, este tipo de hallazgos siguen alimentando el interés colectivo por los “misterios” del planeta que se esconden a simple vista, especialmente cuando aparecen en lugares tan remotos y fotogénicos como el Sáhara. Esta vez, sin embargo, la nave del misterio parece tener base de hormigón y hélices en vez de alienígenas.
