Elon Musk, el magnate que ha convertido Tesla en sinónimo de coches eléctricos y tecnología de vanguardia, vuelve a estar en el ojo del huracán. Su ambición de instaurar la conducción autónoma a gran escala parece chocar ahora con un debate técnico y público que amenaza con poner en entredicho años de promesas y avances. Si bien Tesla ha logrado iniciar pruebas de su sistema en distintas regiones de Estados Unidos, el futuro de esta tecnología no es tan claro como Musk quisiera.
Elon Musk y Tesla en el ojo del huracán: sus declaraciones sobre el LiDAR, cuestionadas
En el centro de la polémica está la discusión sobre los sensores que permiten a los coches "ver" su entorno. Elon Musk ha defendido que el sistema de Tesla se basa únicamente en cámaras, dejando de lado el láser LiDAR, una tecnología que genera mapas tridimensionales precisos del entorno mediante pulsos de luz. Esta declaración ha reavivado la controversia porque, históricamente, LiDAR se considera fundamental para la detección fiable de obstáculos y la medición exacta de distancias, incluso en condiciones de baja luminosidad. Su precisión supera a la de las cámaras, aunque a un coste elevado y con ciertas limitaciones frente a lluvia, niebla o nieve.
Por su parte, las cámaras simulan la visión humana, son más económicas y pueden reconocer señales de tráfico, semáforos y peatones gracias a algoritmos avanzados de inteligencia artificial. Sin embargo, su dependencia de condiciones de luz óptimas y la incapacidad para medir la profundidad de manera natural generan riesgos adicionales. Para compensar, se recurre a estimaciones de distancia mediante complejos cálculos que incrementan la carga computacional y los requisitos de hardware del vehículo.
Expertos en movilidad autónoma coinciden en que un enfoque híbrido, que combine LiDAR, radar y cámaras, ofrece la mayor seguridad, aprovechando lo mejor de cada tecnología. Sin embargo, Musk ha insistido en que estos sistemas mixtos podrían confundir al coche, asegurando que la conducción basada únicamente en visión por cámara es más fiable. Esta postura ha sido cuestionada por especialistas y medios como Electrek, donde Fred Lambert publicó mensajes en los que el propio Musk admite que "visión + radar de alta resolución sería más seguro que solo visión".
"Elon Musk a estado haciendo varias declaraciones afirmando que los sistemas de conducción autónoma que usan sensores LiDAR y radar son más peligrosos que el enfoque de visión por computadora de solo cámara de Tesla", consigna también el citado medio. En un artículo del mismo portal, firmado por Lambert, se expone que estos alegatos son falsos y que Musk no está siendo claro. "No solo es falso, Musk me dijo directamente que estaba de acuerdo en que el radar y la visión podrían ser más seguros que solo la visión, justo después de que Tesla eliminara los radares de sus vehículos", concluía.
Desde 2021, Tesla eliminó los radares de sus Model 3, Y, S y X, confiando en el sistema “Tesla Vision”. Esta decisión ha generado dudas sobre la fiabilidad de su conducción autónoma y la veracidad de las declaraciones de Elon Musk. Competidores como Jeff Bezos observan atentos, preparados para aprovechar cualquier error o avance. El futuro de Tesla en conducción autónoma sigue incierto, marcado por la tensión entre innovación, riesgo y comunicación pública, donde cada mensaje de Musk altera la percepción del sistema.
