Elon Musk tuitea y el mundo permanece en vilo esperando una reacción en casi cualquier ámbito de la vida diaria. Y así ha sido. Un comentario en Twitter de Musk sobre el bitcoin, la criptomoneda en la que Tesla invirtió 1200 millones de euros, se le ha vuelto en contra. El fabricante de coches eléctricos ha visto como después de sus comentarios se ha propiciado una enorme caída en el precio de la criptodivisa, que ha pasado de valer más de 55.000 dólares, unos 45.260 euros a bajar hasta los 48.000 o 39.400 euros. Esto ha causado un efecto colateral: las acciones de Tesla han caído un 8,5% desde el pasado lunes. Como consecuencia, Musk ha dejado de ser el hombre más rico del mundo y ha vuelto a ser adelantado por Jeff Bezos.
Una muestra de la volatilidad de las criptomonedas
Como explican en Business Insider, el impacto para la fortuna personal ha sido tremendo. La mayor parte de la riqueza de Musk proviene de la enorme fuente de acciones depositadas en Tesla, por lo que su comentario le habría llevado a perder 15.200 millones de dólares de golpe según los cálculos de Bloomberg. De esta manera, habría perdido su posición como primera fortuna mundial en la clasificación de los hombres más ricos del mundo a al reducirse su patrimonio a aproximadamente unos 183.400 millones de dólares. En este escenario, el fundador de Amazon, Jeff Bezos, volvería a ser el primer multimillonario del planeta con 186.300 millones de dólares.
That said, BTC & ETH do seem high lol
— Elon Musk (@elonmusk) February 20, 2021
El origen de esta caída se atribuye un polémico tuit de Musk durante una conversación en la red social con el reputado economista estadounidense Peter Schiff. El economista criticó unas declaraciones de Musk en las que destacaba que el bitcoin podría ser tan estúpido como el dinero tradicional, aquel que tiene un valor relativamente estable y es respaldado por los bancos centrales a nivel internacional. Musk fue tajante. "Que te diga que tienes oro no es lo mismo que tenerlo. El oro está sujeto a la latencia y el error, como las monedas tradicionales y el bitcoin", proseguía. "El sistema económico evolucionará para minimizarlos. Dicho esto, el bitcoin y ethereum parecen estar un poco altos (de precio)", concluyó, en tono de broma, hace unos cuatro días. Y el terremoto se despertó el pasado lunes, afectando directamente a Tesla.
Lo cierto es que las criptomonedas son un terreno misterioso e impredecible para muchos analistas y economistas tradicionales, que no terminan de comprender la volatilidad de un sistema de divisas que está ajeno a los mercados y las cotizaciones bursátiles. Aún así, las opiniones de Musk siguen generando terremotos y sacudidas financieras con las que los inversores y miembros de la junta directiva de Tesla no están demasiado contentos. Esto supone un duro revés para la cotización de Tesla en su proceso de modernización con respecto al bitcoin, una criptomoneda en la que había invertido mucho, y que pensaba usar como modo de pago para sus vehículos y productos. Muchos especularon que esta gran adquisición en criptodivisas venía con un objetivo a largo plazo: convertirse en un gran tenedor de monedas virtuales y actuar como banco, con préstamos e intereses basados en ellas.
El rally alcista del bitcoin y otras criptomonedas sigue dando que hablar. Para muchos, la alta volatilidad de estas monedas virtuales es lo peor de cara a su futuro, aunque otros creen que la fiebre despertada entre pequeños y grandes inversores podría hacer que se estabilizara y se convirtiera en un valor real de cara a futuros depósitos por parte de ciudadanos que quieren salir de los productos clásicos del sistema financiero.
