Disney+, que está a pocos días de recibir Star, su división de contenidos para adultos, ha anunciado que ha cerrado 2020 con más de 94,9 millones de suscriptores en todo el mundo. Se trata de una cifra especial que consigue apenas 14 meses después de su lanzamiento oficial. ¿Por qué? Porque es el número de abonados a los que esperaba llegar en 2024. La firma del ratón ha conseguido en apenas unos meses una cifra simbólica a la que empresas como Netflix tardaron años en llegar.
Disney+: Poniendo patas arriba el negocio del streaming
Hace unos años, el streaming era cosa de dos: Netflix y el que pudiera seguirla a la zaga. Durante meses, HBO y Amazon Prime Video reforzaron sus ofertas digitales en vídeo bajo demanda, siempre buscando hacerse un hueco en un mercado que en los últimos tiempos se ha ido atiborrando, casi colapsando, de servicios de lo más variados. La manera de consumir series o películas ha cambiado, y las grandes operadoras de cable han ido adaptando sus modelos de negocio a la nueva era. Pero Disney+ arrancó en pequeño, apoyándose en licencias muy conocidas como Star Wars, Marvel o la empresa de animación Pixar, y ahora apunta a las estrellas con Star, que ofrecerá contenidos para mayores de 18 años en forma de cine y serie para adultos. El éxito de Disney+ es el de Bob Iger, antiguo consejero delegado de la empresa, pero también el de una concatenación de circunstancias como la pandemia y sus confinamientos o cierre de las salas de cine.
En este convulso escenario, muchos de los estrenos de Disney y Pixar han ido a la plataforma de streaming, que ha contado con The Mandalorian, la serie de acción real de Star Wars que ha supuesto el enderezamiento de Lucasfilm a la hora de producir contenido que contente a los fans tradicionales de la saga de George Lucas y a las nuevas generaciones. Mientras se preparan para el mañana con más de 20 series basadas en Marvel y Star Wars, la compañía hace números y se pone a actualizar sus predicciones. Ahora apuntan a lograr una cifra de entre 230 y 260 millones de abonados de aquí a tres años. No suena disparatado, pero sí asombra. Para que os hagáis una idea, en estos momentos, Netflix tiene un total de 203,7 millones de suscriptores, que podrán aumentar considerablemente en los próximos años. Para reforzar su apuesta, Disney ha anunciado que antes de 2024 se pondrá a rodar al menos unas cincuenta producciones originales europeas, y si bien no se ha dicho nada de contenido netamente español, diversos medios nacionales confirman que Sofía Fábregas ha sido reclutada por la división como vicepresidenta de producción original en España para desarrollar futuros proyectos.
Disney apunta alto: pretende reinar también en el negocio del streaming
Poco a poco, Disney ha logrado hacerse un hueco incluso en términos de nominaciones y galardones de prestigio. Para 2026, según un estudio de la consultora británica Digital Research, Disney+ llegará a los 300 millones de suscriptores, superando al conjunto de abonados de Netflix, que se estima en 286 millones de clientes para esas fechas que ahora parecen muy lejanas. La clave es la apertura a los mercados asiáticos y a países como la India, en la que sus contenidos se reclaman y devoran con especial avidez. La misma firma de estudios de mercado, Digital Research, predice que Amazon Prime Video llegará en cinco años a los 184 millones de clientes, HBO Max a 50 millones, Apple TV +a 11 millones y los servicios de streaming chinos, provenientes de una pléyade de operadores y empresas de telecomunicaciones, acumularán 279 millones. Hay que tener en cuenta que China es un mercado muy feroz, con proveedores y portales que se pelean entre ellos por razones políticas y que está sujeto a razones ideológicas derivadas del férreo control del partido comunista chino, eje y centro del gobierno del país.
En estos momentos, y aunque no hay cifras oficiales, se cree que Disney+ ha alcanzado o superado los 100 millones de usuarios y abonados hace escasos días, pues los números ofrecidos por la empresa hacen referencia al pasado 2 de enero, justo a comienzos de año, y mucho antes del lanzamiento de series que han sido un auténtico pelotazo, como la primera producción televisiva del universo Marvel, La bruja escarlata y Visión (Wandavision).
