Heath Ledger nos dejó un 22 de enero de 2008. Con apenas 28 años, se convirtió en uno de los actores más importantes de su generación, consiguiendo papeles que lo transformarían en todo un mito cinematográfico. De hecho, pensaba salir de las pantallas para ponerse tras las cámaras, y tras su trabajo en El caballero oscuro como el Joker -un rol del que habló Christopher Nolan largo y tendido hace unos años-, parece ser que tenía pensado dirigir su primera película. El proyecto que habría sido su debut en la dirección, más allá de algunos videoclips, era una adaptación de Gambito de dama, la novela que ahora ha llevado Netflix al formato mini serie de la mano de Scott Frank y Anya Taylor-Joy.
Un proyecto personal que habría tenido la forma de una película
Gambito de dama, Frank ha desarrollado su adaptación en base al libro de Walter Tevis, un éxito publicado en 1983. Para ello, ha contado con la colaboración con Allan Scott, un pseudónimo con el que se protege Allan Shiach, un escritor escocés que firmó guiones muy celebrados como Amenaza en la sombra o La maldición de las brujas.
Shiach se obsesionó con el libro de tal manera que consiguió los derechos de adaptación de Gambito de dama en 1992, y durante años, como explican en Cinemanía, el proyecto pasó de mano en mano. Estuvo cerca de ser firmado por nombres como Michael Apted o Bernardo Bertolucci, pero se guardó en un cajón varias veces hasta la llegada de Heath Ledger, que mostró una curiosidad real en él.
La salida del italiano condenó a Shiach a una búsqueda constante para la persona ideal, y acabó contactado con Ledger, que le conquistó. Era la persona necesaria para la adaptación. "Se mostró muy apasionado. Era un joven muy intenso, muy interesado en el proyecto. Hablamos y hablamos por teléfono, hasta que nos reunimos a finales de año para ponernos a trabajar", hacía referencia el guionista en relación a lo sucedido en 2007. Según parece, los últimos meses de vida de Heath Ledger estuvieron dedicados en preparar su debut como director de cine, ajustando la adaptación e incluso tanteando nombres para el reparto. Se dice que incluso llegó a contactar con Ellen Page para ofrecerle el papel protagonista del film. "Hice varios borradores del guion y él me estuvo pasando notas, nos reunimos en Nueva York y en Londres. Ya le había mandado el guion a Ellen Page y tenía muchas ideas para el resto del reparto, principalmente amigos y conocidos suyos del mundo de la interpretación", recordaba el guionista sobre la película, que afirma se esperaba rodarse en los últimos meses de 2008.
Tenéis más detalles en un artículo especial de The Independent publicado en 2008. Gambito de dama está disponible en Netflix.
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