La amistad entre Christopher Nolan y Zack Snyder es una de las más fascinantes del cine contemporáneo, especialmente dentro del género de superhéroes. Su colaboración, que se fue forjando desde la producción de El hombre de acero, la polémica renovación del mito de Superman que partía de una historia concebida por Nolan junto al guionista David S. Goyer, nos ha regalado algunas de las grandes historias del género bajo el sello de DC. Aquella película, protagonizada por Henry Cavill, marcó el inicio de un respeto mutuo que ha trascendido el tiempo, con Nolan mostrando su admiración hacia la obra de Snyder, como cuando describió Watchmen (2009) como una película muy adelantada a su tiempo.
Christopher Nolan destaca la influencia de Zack Snyder en todo el cine de superhéroes y regala unas palabras que demuestran el peso del director de 300 en el género
Snyder, uno de los cineastas más particulares y especiales de Hollywood, muy conocido por su estilo visual distintivo y su enfoque rompedor en el cine de superhéroes, se ha convertido en una figura polarizadora. Desde su debut con El amanecer de los muertos (2004) y su consagración con 300 (2007), la célebre adaptación de la novela gráfica de Frank Miller, el director ha cimentado su reputación como un creador que combina visuales espectaculares con narrativas cargadas de simbolismo. Hay quien lo alaba y aplaude y quien lo odia, sin dejar indiferente nadie.
Películas como Watchmen y su contribución al Universo Extendido de DC (DCEU) con El hombre de acero y Batman v Superman: El amanecer de la justicia (2016) han redefinido las expectativas del género, aunque no sin generar controversia por su aproximación a los personajes de los cómics. En un interesante perfil con The Atlantic, titulado de forma inteligente como “El director que la gente ama odiar”, citan a Nolan y éste se refiere, muy contundente, a la huella indeleble que ha dejado Snyder en el cine de superhéroes.
"No hay una película de superhéroes hoy en día que no tenga algún tipo de influencia de Zack”, explica Nolan. Sus palabras hacen hincapié en la capacidad de Snyder para moldear el género de mayor éxito en la taquilla en los últimos tiempos, influenciando desde las tonalidades narrativas -generalmente ominosas, oscuras y trascendentales- hasta las elecciones estéticas que ahora se han ido convirtiendo en comunes en las producciones de este tipo. Nolan también alabó el amor que Snyder siente por el potencial del cine: “Cuando ves una película de Zack Snyder, ves y sientes su amor por el potencial del cine. El potencial que tiene para ser fantástica, para exaltar su propia realidad, pero también para conmoverte y emocionarte”, concluía.
Eso sí, el recorrido de Snyder en el cine de superhéroes parece haber llegado a una pausa. Tras el lanzamiento de La Liga de la Justicia de Zack Snyder (2021), una versión extendida y renovada de la producción original de 2017, el director ha explorado nuevas fronteras con Rebel Moon, un ambicioso proyecto de ciencia ficción para Netflix que buscaba expandir su visión creativa más allá de los superhéroes. Pero no han funcionado bien, llevando a Netflix a cortar lazos con el director, algo que ha acabado por frenar los futuros proyectos que tenían en marcha.
A pesar de este traspié, Snyder no está del todo alejado de sus obras pasadas, pues se rumorea que está negociando con Warner Bros. para retocar el montaje de Sucker Punch (2011) y está preparando su regreso a 300 en forma de serie. Sea como sea, y con admiradores como Christopher Nolan, queda claro que, más allá de las críticas y los fracasos, el impacto de Snyder en cada película de superhéroes que llega a la gran pantalla es más que evidente.