La película Immaculate, protagonizada por Sydney Sweeney, ha irrumpido en la escena cinematográfica con una propuesta que ha provocado un torbellino de reacciones. La polémica desatada en torno a su temática, que entrelaza la religión con el terror de manera provocativa, ha servido no solo como un catalizador de atención sino como un arma de doble filo, atrayendo tanto elogios como críticas feroces y tanto el director como la propia actriz, lo han sabido utilizar a su favor.
Entre estos, destacan los comentarios de figuras como Joe Russo (no relacionado con los Hermanos Russo), quien ha señalado el tipo de reacción que "los cineastas de terror sueñan", marcando un hito en la recepción de la obra de Sweeney. La controversia, lejos de ser un obstáculo, ha sido magistralmente orquestada por Neon, la compañía de producción detrás de Immaculate, convirtiendo las críticas en una poderosa herramienta de marketing.
Una estrategia particular ha sido la utilización de citas de detractores para promocionar la película, incluso con camisetas con estas citas despectivas sobre el filme y la protagonista, que incluye el nombre de usuario que las publicó. Esta táctica, además de reflejar un astuto manejo de las dinámicas de las redes sociales, demuestra cómo la controversia puede ser redirigida para aumentar el interés y la curiosidad en torno a una obra cinematográfica.
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— NEON (@neonrated) March 23, 2024
Un marketing controvertido que se apoya en la controversia
Immaculate, que se acaba de estrenar en los cines estadounidenses, debutando en el número 4 de la taquilla doméstica con 5,36 millones de dólares recaudados, se adentra en terrenos delicados al abordar la religión desde una perspectiva que desafía abiertamente convenciones y creencias establecidas. En el centro de su trama se encuentra Celia, una monja embarazada interpretada por Sweeney, que se enfrenta a dilemas sobre la autonomía corporal dentro de un contexto que sugiere una posible gestación inmaculada. Este enfoque no solo provoca un diálogo sobre temas sensibles como la fe, la moral y los derechos reproductivos, sino que también posiciona al filme como un espejo crítico de las tensiones y contradicciones presentes en las discusiones contemporáneas sobre la religión y la sociedad.
Incluso Sweeney se involucró directamente en leer pasajes de la Biblia, específicamente seleccionando versículos que, aunque reales, resuenan con una intensidad y ferocidad inusuales. También hemos visto a la actriz de Euphoria junto a su compañera de reparto, Simona Tabasco, 'jugando' al "F*ck, marry, kill" con iconos del terror.
IMMACULATE presents Fuck Marry Kill Horror Edition with Sydney Sweeney and Simona Tabasco.
Opens in theaters March 22: https://t.co/UgLVS7spjj pic.twitter.com/62MhKWdvTx
— Immaculate (@ImmaculateMovie) March 14, 2024
