David Zaslav, director ejecutivo de Warner Bros., salió al frente la semana pasada como recogieron desde The Hollywood Reporter y Deadline para explicar lo que muchos ya suponíamos: la actual huelga de guionistas y actores en Hollywood (que lleva ya más de 130 días en marcha para los primeros y 60 días para los segundos) va a provocar pérdidas millonarias en las principales empresas cinematográficas de Estados Unidos. En concreto, se estima que el conglomerado Warner Bros. Discovery se vea afectado este 2023 con pérdidas de entre 300 y 500 millones de dólares, algo que ni tan siquiera el fenómeno mundial que ha supuesto Barbie en taquilla va a poder solventar.
Warner Bros. es una de las principales afectadas por la huelga con pérdidas millonarias
"Si bien WBD tiene la esperanza de que estas huelgas se resuelvan pronto, no puede predecir cuándo terminarán finalmente", explicaba Zaslav a los medios la semana pasada, añadiendo: "Con ambos gremios todavía en huelga hoy, la compañía ahora asume que el impacto financiero de estas huelgas para WBD persistirá hasta finales de 2023". Y es que, según la empresa en su guía revisada del EBITDA, el rango de ganancias para todo el presente año ronda los 10,5 mil millones de dólares en beneficios o los 11 mil millones en el mejor de los casos, algo que nos deja vislumbrar un golpe de alrededor de 300 a 500 millones de dólares en pérdidas si se compara con el anterior objetivo de la compañía.
Zaslav ha estado muy comprometido en las últimas semanas en las negociaciones con los sindicatos de Hollywood de la SAG y el WGA para poner fin al paro laboral. "WBD continúa priorizando y trabajando diligentemente con otros líderes de la industria para resolver las huelgas actuales" en lo que según ellos mismos denominan "de una manera justa". Según el comunicado, desde Warner valoran la importancia del trabajo tanto de escritores como de actores.
Retrasos y producciones paralizadas
De momento aún nadie sabe cuándo se pondrá fin a esta situación crítica. Es seguro afirmar que el parón actual ya está afectando a la industria de Hollywood enormemente, y no solo a Warner. Cabe mencionar que, entre otros estrenos, la compañía ha retrasado varios meses el lanzamiento de la secuela de Dune. "Aquí existen verdaderos desafíos para la industria. No nos hemos recuperado completamente del Covid, particularmente en lo que respecta al cine", apuntó Zaslav. "Estamos muy concentrados en cómo recuperar esta industria".
Otras compañías como Marvel y Disney también han anunciado severos cambios en sus calendarios de cara a los próximos meses. La enorme cantidad de producciones que estaban en pleno rodaje al inicio de esta huelga también se están viendo afectadas por la misma, de tal manera que es lógico pensar que incluso a comienzos del próximo 2024 seguiremos notando los efectos de este parón.
En el caso de Warner, por muy bien que les haya ido con Barbie (recordemos que hace poco se convirtió en la película más taquillera de su historia) y por mucho que se hayan ahorrado 100 millones de dólares hasta ahora con la huelga, este tren descarrilado no puede ser salvado por una sola película y a largo plazo las pérdidas pueden ser mastodónticas, algo de lo que Zaslav es más que consciente: "Si podemos resolverlo pronto, entonces el impacto a largo plazo se minimizará".
El resultado, al final del día, es una cantidad desmesurada de equipo y profesionales paralizados sin poder hacer nada debido a la huelga. Por lo tanto, cada día que pasa es un día más que las majors pierden dinero. El sindicato de productores debe ponerse las pilas de una vez por todas si quiere llevar a buen puerto esta huelga. Las negociaciones deben resolverse más pronto que tarde, o de lo contrario los efectos serán drásticos a niveles que ahora mismo pocos pueden imaginar. "Estamos listos y con muchas ganas. Así que tan pronto como se resuelvan estas huelgas, todos estarán listos para volver al trabajo, nosotros en particular", reconoció Zaslav.