La Purga, la saga que nos cuenta cómo tras un colapso económico surge un nuevo partido político que permite que en Estados Unidos una noche al año se de rienda suelta al crimen y al asesinato, es una de las más exitosas de Universal. La primera cinta marcó un antes y un después, cautivó al público con su propuesta, que pronto fue seguida con distintas secuelas. Sin embargo, pese al deprimente mensaje de su trama, James DeMonaco, creador de la licencia, piensa que el público no ha captado bien la idea central y que ha glorificado su oscuro punto de partida.
El creador de La Purga cree que el público no ha entendido bien sus películas y está obsesionado con glorificar un hecho grotesco y oscuro
En una charla con Collider (vía ComicBook) DeMonaco piensa que hay una buena parte del fandom que ve La Purga como una especie de deseo cumplido, en lugar de la obra sobre la moralidad que debe ser.
"Creo que lo más importante que he visto a lo largo del estreno de todas las películas de La Purga es que hay una parte de la audiencia, no creo que sea grande, y rezo para que no sea grande, que no ve que estoy contando en esta obra sobre la moralidad, y siempre dejo claro que el tema de la purga es muy malo", explica DeMonaco.
"Y ahí es donde todo este asunto se vuelve muy extraño. Algunas personas lo ven como una especie de realidad que desean que se cumpla a toda costa", afirma. "De verdad, odio las armas, así que para mi el día más aterrador en Estados Unidos será el día en el que todo el mundo lleve una pistola en el bolsillo", concluía. Desgraciadamente, pese a que el guion de la sexta entrega lleva escrito desde hace algún tiempo, parece que Universal no quiere darle luz verde. La Purga 6 está terminada y preparada para estrenarse en los próximos años, presentándonos un punto de partida desgarrador, con Frank Grillo regresando al papel protagonista.
La nueva entrega, que tendría que contar con un mayor presupuesto -algo que Universal teme, ya que no quiere que el filme sea costoso a fin de rentabilizarlo rápidamente en taquilla-, nos contará cómo Estados Unidos, aún más dividida y desgarrada en un futuro cercano, se organiza en diferentes estados según orientación sexual y política. Veremos si sigue adelante.
