Con los precios de la vivienda altísimos en grandes ciudades como Barcelona y Madrid, aparece la venta de un castillo ubicado en Toledo por un precio que ha hecho saltar todas las alarmas. El castillo de Almonacid se vende actualmente por el precio de 1 euro debido a que está muy dañado, prácticamente en ruinas, y está siendo invadido por la vegetación en su interior. La primera referencia sobre este castillo data del año 848. De origen musulmán, servía de punto estratégico de vigilancia de un antiguo camino a La Mancha. Para mayor sorpresa, el castillo no pertenece al ayuntamiento, sino a un grupo de particulares que no sabe cómo quitarse de encima esta propiedad con la que no pueden cargar, puesto que requiere de una serie de gastos bastante elevados para su mantenimiento.
El nuevo propietario deberá comprometerse a restaurar el castillo y a mantenerlo
La venta del castillo de Almonacid viene con trampa, por supuesto, puesto que ese euro es tan solo un valor simbólico para hacerse con la propiedad total. Posteriormente a su adquisición, el nuevo propietario deberá hacerse cargo de la reparación de la arquitectura medieval y de su respectivo mantenimiento, cosa que por otro lado no será para nada barata teniendo en cuenta que habría que reconstruir y eliminar toda la vegetación que invade el castillo y que puede verse fácilmente en diferentes imágenes del lugar. El castillo carga con una amplia historia a sus espaldas, pero la etapa que más puede llamar la atención es cuando se adaptó para convertirse en una mazmorra gigantesca.
Alfonso Enríquez, el hijo bastardo de Enrique II que fue conde de Gijón y Noreña, estuvo encarcelado durante ocho años en el lugar sometido a todo tipo de malos tratos. A principios del siglo XIX, sirvió como refugio para las tropas que hacían frente a los franceses en Guerra de la Independencia, aunque finalmente fue conquistado por los hombres de José Bonaparte y parte de la estructura quedó destruida y muy dañada. Después de tantos años, se quiere revitalizar el lugar dando un fuerte lavado de cara para que su historia brille de nuevo.
