Sylvester Stallone mantiene, desde hace unos años, un tira y afloja relacionado con su participación en la propiedad de la saga de Rocky, a la que se le ha dado un soplo de vida fresca en los últimos años con las películas de Creed, protagonizadas por Michael B. Jordan. Si bien a Stallone siempre se le ha pagado por las películas de Rocky y Creed, el actor y productor sostiene que no tiene derecho alguno sobre los personajes o la licencia en sí. Y esto, lógicamente, ha generado fricciones con el supuesto dueño de todo el tinglado púgil, Irwin Winkler (vía ComicBook).
Stallone ataca al productor de Rocky y lo representa con una serpiente saliendo de su boca
Stallone recurrió a su cuenta de Instagram para dejar clara la situación que atraviesa la producción, con la que está de acuerdo a nivel creativo pero confesando sus problemas con Winkler, poseedor de los derechos de la licencia y de los personajes. Desde su perfil oficial, Stallone publicó un dibujo de Winkler, de 93 años, con una lengua de serpiente saliendo de su boca. "Esto es un retrato muy halagador", explica. Según el actor de la próxima Samaritan, Winkler retiene los derechos de la franquicia de Rocky y no quiere soltarlos o compartirlos.
"Irwin controla a Rocky desde hace más de 47 años y ahora hace lo mismo con Creed, simplemente quiero recuperar un poco de lo que queda de mis derechos antes de pasárselos a sus hijos y herederos. Sería lo justo", explica en su post. El actor, que finalizó hace unos meses Los mercenarios 4, continuó diciendo que hablar sobre el tema de los derechos de Rocky y Creed es "doloroso" para él, aunque no ha querido despedirse sin lanzar un mensaje positivo a sus seguidores, agradeciendo a los fans de la saga por su apoyo y amor a lo largo de los años.
"Este es un tema doloroso que me carcome el alma, porque quería dejar algo de Rocky para mis hijos, pero siempre es bueno escuchar a los fans más leales", concluía. Aunque el intérprete sí estuvo en las dos primeras películas de Creed y ha estado involucrado en la saga durante años, no tiene derechos de explotación ni royalties. Como confesó el propio Stallone, cuando intentó hablar del tema con los responsables de la licencia, agregó que le dijeron que no se quejara ya que siempre le pagaban por las películas.
