Bruce Willis anunció que se retiraba de la actuación luego de ser diagnosticado de afasia, poniendo fin a una carrera cinematográfica muy nutrida y llena de grandes proyectos y sagas. Amigos, familiares y compañeros realizaron muchos homenajes y tributos, e incluso los Razzies, los premios a lo peor de Hollywood, pidieron perdón por cachondearse del actor en los últimos años. Y es que como han destapado en Los Angeles Times, parece que el actor estaba siendo mal aconsejado y manipulado, obligándolo a actuar en cientos de proyectos de dudosa calidad.
¿Ha sido Bruce Willis coaccionado en sus últimos años como actor?
Willis, afectado por un trastorno neurológico, no puede actuar con normalidad al verse incapacitado en su comunicación oral y escrita. En una emotiva carta, los hijos de Willis, su mujer Emma y su exmujer Demi Moore, comentaron que el diagnóstico los ha llevado a apartarlo de la actuación, pero como explican desde el citado medio, parece que el intérprete estuvo mal aconsejado y coaccionado a actuar en decenas de proyectos de mala calidad en los últimos años, siendo usado como reclamo comercial para otorgar cierto postín a numerosas películas de serie B. En apenas cuatro años, Bruce Willis ha participado en 22 filmes, una cantidad ingente de proyectos, que habrían sido en su mayoría la muestra de los tejemanejes de sus representantes y agentes.
Según los testimonios de directores y actores que han trabajado con Bruce Willis en los últimos años, parece que el intérprete estuvo mal aconsejado y obligado a salir en algunas producciones, mostrándose visiblemente confuso y cansado en muchos de los rodajes. Mike Burns, director que trabajó con él en Sin escapatoria, estrenada en 2021, ha confirmado que recibió instrucciones directas para reducir su tiempo en pantalla. "Parece que tenemos que reducir el número de páginas de Bruce a unas 5. También hay que abreviar su parte para que no haya monólogos, etc", tuvo que confirmar el cineasta y transmitírselo a su equipo.
A Burns le ofrecían dirigir otra película con Bruce Willis a los pocos meses, Wrong Place, y preocupado, el cineasta preguntó cómo estaba el actor y si era necesario apretarlo tanto en el sentido profesional. "Me contaron que era una persona distinta, que se había recuperado y que estaba mejor que el año pasado", explica. Así que accedieron a trabajar con él. La verdad salió a la luz, el actor estaba peor, con muchas dificultades a la hora de actuar en el plató y con serios problemas a la hora de hablar. "Cuando terminamos pensé ‘se acabó, no voy a hacer ninguna otra película de Bruce Willis. Me aliviaría que se tomara un tiempo libre’", comentó el director.
Al parecer, la agencia de representación de Bruce Willis buscaba rodajes muy concretos, no extendía su participación a más de dos días en las filmaciones, y buscaba que los contratos en los que se veía envuelto no tuvieran una duración superior a las ocho horas. Elegían cintas de poco presupuesto, producciones en las que el actor fuese el principal reclamo. Willis iba de un proyecto a otro, sin saber qué hacía en concreto, y recibiendo dos millones de dólares para cada uno de estos títulos. Se dice que en Mercenarios de élite, filme estrenado hace dos años, el equipo acabó realmente preocupado luego de que Willis disparase una bala de fogueo en un momento del rodaje que no era necesario. El equipo se asustó.
El actor de Jungla de cristal no podía seguir las instrucciones de forma clara, y los equipos de producción y los representantes intentaba ocultar una y otra vez estos momentos de incertidumbre, confusión y problemas. Jesse V. Johnson, actor que ya había trabajado como doble de acción de Willis hace décadas, coincidió con él hace unos meses en White Elephant, película que iba a dirigir. "No era el Bruce Willis que yo recordaba", explicaba Johnson. "Me afirmaron que le alegraba estar ahí, pero me hacían hincapié que lo más recomendable era rodar y dejarle marcha cuanto antes", recuerda. Y en una de las secuencias, Willis se quedó parado, completamente desorientado. "Sé el motivo por el que todos estáis aquí... ¿pero por qué estoy yo aquí?", comentó el protagonista de Luz de luna.
Bruce Willis repetía frases sin saber el significado. Los rumores de una manipulación constante por parte de sus agentes, era ya algo que muchas producciones asumían. A Johnson, tras White Elephant, le ofrecieron dos películas más con Willis, pero se negó en rotundo. "Todos somos fans de Bruce Willis. El acuerdo nos pareció incorrecto y, en última instancia, un final bastante triste para una carrera increíble, con el que nadie se sentía cómodo", explicaba el actor y director, que como Chuck Rusell, director de las dos últimas cintas de Willis, cree que estaba perdido en estos últimos años de su carrera. Los productores de estas cintas han negado comentar estas acusaciones, así como los actores y responsables del séquito de Willis, Adam Huel Potter y Stephen J. Eads, que iban con él y eran contratados en todas y cada una de estas cintas. Ninguno ha querido declarar en el artículo.
