'El club de la lucha' tiene un extraño final censurado en China

El club de la lucha es una de las cintas más influyentes de la historia reciente del cine. La obra de David Fincher, basada en la novela de Chuck Palahniuk, sigue siendo a día de hoy una fuente de polémicas, memes e historias. La producción se ha estrenado en el servicio online de Tencent, el portal de streaming más grande e importante de China, pero lo ha hecho con una versión censurada por el gobierno. No es de extrañar, hemos visto momentos realmente locos en los últimos meses al respecto, con cambios en documentales, especiales o películas, así como con guías que intentan que los hombres no sean afeminados en las cintas que se estrenen el país.

Un final desconcertante y extraño para El club de la lucha en China

Si no habéis visto El club de la lucha, cuidado: vamos a tocar temas muy sensibles relativos a su final. En la versión occidental estrenada en cines y formato doméstico de El club de la lucha, todo acaba con con el personaje de Edward Norton 'matando' de forma simbólica a su álter ego Tyler Durden, (Brad Pitt). Pese a ese acto, el atentado con el que habían soñado él y sus seguidores, sigue adelante y con la Where Is My Mind de los Pixies, todo explota, haciendo que la economía mundial colapse. Sin embargo, en la versión china, y como informan desde Cinemanía, tras la muerte del personaje de Pitt, los espectadores del país asiático pasan a un corte a negro y un texto que relata lo que ha ocurrido. Y sí, no tiene sentido.

"Mediante la pista proporcionada por Tyler, la policía descubrió rápidamente el plan y arrestó a todos los criminales, impidiendo que el edificio explotase. Tras el juicio, Tyler fue confinado en un manicomio y recibió tratamiento psiquiátrico. Abandonó el hospital en 2012", concluye el cartel en chino que intenta concluir el filme al gusto del gobierno comunista del país. Como recogen algunos medios como The Guardian, el nuevo final ha generado mucha polémica, pues los espectadores chinos habían accedido a copias piratas de El club de la lucha hace años y conocían cuál era la conclusión correcta.

El final diseñado por la censura china altera el significado original de la obra, una historia centrada en la subversión y la rebelión, transformándolo en una especie de alegato a lo que debe ser correcto en el país: alertar a las autoridades y esperar que ellas actúen solucionándolo todo. El primer mercado cinematográfico del mundo tiene un complejo sistema de filtros censores, que llevan a distintas obras a pasar por el aro si quieren estrenarse en las salas de cine o las plataformas de streaming autorizadas.