Martin Scorsese es una de las figuras más conocidas del panorama del cine alrededor del globo entero, a la vez que uno de los creativos más polémicos en los años más recientes. El director ha hecho varios comentarios despectivos acerca de las películas de Marvel y de superhéroes en general, algo que ha desatado más de una polémica entre los fans del cine de superhéroes. Sin embargo, el tema que trataremos a continuación poco o nada tiene que ver con Marvel. De hecho, está directamente relacionado con uno de sus clásicos atemporales: Taxi Driver.
Martin Scorsese sigue enfadado porque no pudo corregir un color en la edición de la película
Fran Lebowitz, la famosa escritora estadounidense, estableció un vínculo de amistad con Scorsese allá por 2010 durante la producción del documental Public Speaking de HBO. Una década más tarde, ambas personalidades se reencontraron en Supongamos que Nueva York es una ciudad, la serie documental estrenada en Netflix que ayudó a fortalecer su unión amistosa.
Lebowitz y Scorsese tuvieron tiempo de sobra para tener charlas distendidas acerca de todo tipo de temas, y recientemente la escritora ha tenido la oportunidad de hablar en Los Ángeles Times sobre un tema que saca de sus casillas al director.
Lebowitz ha revelado que Martin Scorsese siempre tuvo problemas en lo que respecta a la utilización del color en la cinta Taxi Driver de 1976. Las declaraciones de la escritora neoyorkina han sido las siguientes: "Lo que más tiempo le lleva a Marty es el montaje, porque él nunca cree que haya terminado. Te garantizo que si no le hubieran sacado de ahí aún estaría montando Taxi Driver. Es algo que todavía le enfada. Me dijo en varias ocasiones: ‘¿Sabes lo que estropea Taxi Driver? El color rojo. El estudio no me dio suficiente dinero para corregir el color rojo, y por eso es horrible’. Y yo le contesté: ‘¿Sabes qué tiene de malo Taxi Driver, Marty? Nada".
El tiempo dio la razón a Fran Lebowitz, ya que Taxi Driver es en la actualidad una de las películas más recordadas del director y ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes en el mismo año de su estreno. Además de las declaraciones acerca de la espinilla clavada de Scorsese, la escritora ha aprovechado para hablar de su relación de amistad: "Para mí las grandes amistades son emocionalmente (y no lo digo en un sentido erótico) como las relaciones amorosas. Es algo químico. Durante un tiempo, cada vez que veía a Marty en una fiesta, siempre me pasaba toda la noche hablando con él".