Danny Morrison es un soldado del ejército británico que ha admitido en declaraciones concedidas a la BBC ser aficionado a los videojuegos y que su primera misión en Afganistán fue "mucho más realista" que Call of Duty, la célebre saga bélica de Activision.
Natural de Halewood, en Liverpool, este soldado admite que no sabía qué podía esperar del combate real y que tenía como modelo esa serie de videojuegos de guerra a la que es aficionado.
Morrison suma 21 años y sus declaraciones son bastante peculiares. "Si te disparan te disparan. Si no te dan es un premio." "No sabía qué esperar", añade.
En una aparente desconexión con la realidad, señala también que, en cuanto a la guerra, "juegas a Call of Duty y piensas que va a ser así. Pero es mucho más realista que un videojuego", en lo que parece ser el descubrimiento de Morrison de que la realidad es realista, y la ficción ficticia.
Su misión en Afganistán se ha centrado en entrenar a las fuerzas del orden público del país.